Begoña Alfaro (Carcastillo, 1982) se dispone este verano a socializar la marca de la nueva coalición surgida en Navarra y presentada el 2 de julio, con la concurrencia de Podemos, Izquierda Unida, Batzarre e independientes. Esta abogada, especializada en derecho hipotecario, tuvo una primera incursión en 2015 en la primera línea de la política como candidata de Unidad Popular al Congreso (la marca de Izquierda-Ezquerra en esas Generales), y posteriormente, en 2021, se convirtió en coordinadora de Podemos Navarra. “Nos vamos a patear todo el territorio navarro para que se conozca y para escuchar”, anuncia la portavoz de la nueva coalición Contigo/Zurekin

Momento fundacional, con el sabor y la ilusión de un estreno.

–Estamos contentísimos y contentísimas. La presentación que hicimos fue un éxito, la recepción que vemos que ha tenido en la calle y entre la gente es muy positiva, vamos con muchísima ilusión y con ganas ya de empezar a funcionar como proyecto unitario que somos.

En lo personal, supongo que consciente de que la vida le va a cambiar los próximos años.

–Sí, totalmente asumido. Lo reflexioné lógicamente antes de dar el paso, pero tenía claro que este proyecto era posible en Navarra, unitario, progresista, valiente, para Navarra y desde Navarra, y pesó más esa voluntad y compromiso que la reflexión respecto al cambio que va a suponer en mi vida.

¿Cómo se define políticamente?

–(Lo piensa). Como una persona valiente, progresista sin duda, pegada a la calle y con el claro objetivo de hacer una política más valiente en Navarra, más osada.

¿En qué sentido?

–Hay determinadas cuestiones en las que entendemos que se puede ir más allá, que afectan al día a día de los navarros y de las navarras en los que se podría incidir y que todavía no se ha hecho. Si bien hacemos una valoración positiva, como no puede ser de otra forma, porque formamos parte del actual Gobierno, en determinadas materias y cuestiones se podría escuchar más a la ciudadanía y aprobar políticas públicas más valientes.

¿Cómo cuáles?

–Ejemplos: en materia de fiscalidad, la última reforma fiscal del Gobierno de Navarra contemplaba medidas positivas en relación con las rentas bajas, pero no hay una reforma fiscal progresiva si no se tocan también las rentas altas. Entendemos que la actual regulación del impuesto de Sociedades no es justo. Y no me estoy refiriendo a la pequeña y mediana empresa. Otro ejemplo: en vivienda, donde se desaprovechó en mi opinión una oportunidad buenísima, la última reforma de la ley foral, para que las viviendas públicas de alquiler que hemos pagados todos los navarros y navarras nunca dejen de ser públicas. Otra materia, en ecologismo y medioambiente, sobre todo en este momento, en la ley foral de cambio climático se quedó fuera el bloque de fiscalidad verde o ambiental, tasas, impuestos o ayudas. O también es relevante aprobar una empresa pública de energía. Tenemos esa posibilidad, no puede ser que el combustible y la electricidad no se estén considerando elementos esenciales como el pan y el agua, que tienen precios regulados, y queden al albur de usureros. Una empresa pública de energía ayudaría a paliar esas deficiencias.

"Me defino como una persona valiente, progresista, pegada a la calle y con el objetivo de hacer políticas más osadas"

Desde que Podemos e IU confluyeron en el Estado, parecía que eso llegaría a Navarra, pero en 2019 no se alcanzó algo así. ¿Fue un error?

–Fue un error clarísimo y los resultados de 2019 así lo demostraron. El momento actual, el clima general y los protagonistas son diferentes. Se ha sabido enmendar ese error con el lanzamiento de este nuevo proyecto político.

¿El Gobierno de Chivite ha hecho un giro conservador al cambio iniciado en 2015?

–Personalmente creo que no. Lo mismo que digo que se puede hacer más y aprobar políticas más valientes sin lugar a dudas, creo que la línea que se ha mantenido en la actual legislatura es progresista, exactamente igual que la que se inició en 2015 con el anterior Gobierno.

Contigo/Zurekin es una oferta de izquierdas.

–Sí, pero sobre todo nos gusta destacar que es una apuesta sobre todo novedosa y progresista.

¿Qué diferencia hay entre izquierda y progresismo?

–Está clarísimo que no hay diferencia, pero sí que entendemos que puede haber personas que huyan de etiquetas, pero que tengan claro que se pueden adoptar medidas para mejorar sus vidas y las de sus vecinos y vecinas. Entendemos que hay una mayoría social que no está participando en la política porque no forma parte de ningún partido.

Mucha gente da la espalda a la política, con toda la oferta política que hay progresista en Navarra. Parece evidente que atraerla es difícil.

–Yo provengo de la vida social en Navarra y está claro que en los últimos años se ha producido una desafección importantísima de la ciudadanía respecto a la política. Uno de nuestros objetivos es intentar revertir dentro de nuestras posibilidades ese contexto. Tratar que la ciudadanía nos perciba como un espacio útil no solo para mejorar sus vidas, sino para que participe activamente en este proyecto.

En la medida que EH Bildu se mueve en parámetros similares, paradójicamente tienen ahí una alianza y a la vez una competencia en un espacio lindante.

–Yo creo que el matiz diferenciador puede estar claro. En cuestiones sociales se puede llegar a acuerdos, de hecho se están dando ya, y el matiz diferenciador es la cuestión identitaria. Allí tenemos diferencias, desde luego en lo social, similitudes.

¿Le molestaron las declaraciones de Nuin a este periódico diciendo que ve en Batzarre y Podemos una posición “acomodaticia” que da por hecho una reedición del Gobierno progresista de Navarra?

–No existe una posición acomodaticia, eso no es cierto. En septiembre vamos a poner en marcha los mecanismos de participación para elaborar con la ciudadanía, no desde los despachos, un programa electoral que sea fiel reflejo de las necesidades ciudadanas. Pero ni existe una posición acomodaticia ni va a existir a futuro, que es lo que a mí me importa. Vamos a defender el programa el programa, los principios y la hoja de ruta de Contigo-Navarra.

“La ciudadanía” es un concepto muy general.

–Tiene toda la razón, a partir de septiembre vamos a poner en marcha los distintos mecanismos de participación para asegurarnos que toda persona a título individual, colectivos, organizaciones sindicales, o todos aquellos espacios que tienen mucho que decir sobre qué Navarra queremos, puedan participar y ver plasmado en un programa electoral sus necesidades, las cosas del comer.

"El matiz diferenciador con EH Bildu es la cuestión identitaria. Allí tenemos diferencias"

¿Qué nota le pondría a María Chivite en su gestión hasta ahora en el Gobierno de Navarra?

–Un siete.

El documento político de Contigo/Zurekin dice que la identidad vasca, española y europea “pueden convivir juntas y colaborar”. ¿Cuál es su planteamiento para desarrollar o acomodar la conciencia vasca en Navarra?

–Eso tiene muchas vertientes, la cultural, en el ámbito de la función pública... todas esas medidas concretas durante este curso son las que vamos a concretar en esa elaboración del programa. Lo que sí que tenemos claro es que durante mucho tiempo la cuestión identitaria o el enfrentamiento entre identidades en Navarra ha sido el alimento que ha permitido vivir políticamente a muchos. La suma de identidades enriquece a cualquier sociedad, y por lo tanto a lo que no vamos a contribuir en ningún caso es a mantener ese enfrentamiento.

“Debemos cuidar e impulsar” el castellano y el euskera, “siempre desde la libertad, la garantía de derechos y la convivencia”. Dada la asimetría existente, ¿qué hay que cuidar de cada lengua?

–En Contigo-Navarra tenemos clarísimo que hay que cuidar el euskera, potenciar su uso y mantenerlo como una clave de nuestra cultura y de nuestra identidad.

¿En qué se puede concretar esto de cara a disminuir la brecha entre euskaldunes y gente que no ha tenido contacto con el euskera? Por ejemplo en Pamplona...

–Yo personalmente no puedo hacerle una propuesta concreta.

Pero sí tendrá un ideario. ¿Cómo ve la situación en Pamplona?

–Personalmente creo que hay que hacer una apuesta firme por el uso y el conocimiento del euskera de todas aquellas personas que deseen hacerlo, lógicamente. Hablamos desde modelos educativos a la potenciación del uso entre personas jóvenes. Recientemente salían unos datos que arrojaban que entre la juventud ha disminuido mucho el uso del euskera.

Otro punto que destaca el documento es el municipalismo. Recuperar presencia en Pamplona será clave para la fortaleza de la nueva coalición. ¿La aspiración es recuperar la alcaldía de Tudela?

–Nuestras aspiraciones en el ámbito municipal son lógicamente recuperar la presencia institucional en el Ayuntamiento de Pamplona y creemos que hay posibilidades serias de recuperar la alcaldía del Ayuntamiento de Tudela. A por eso vamos a ir.

"Aspiramos a la presencia en el Ayuntamiento de Pamplona y en Tudela vemos posibilidades de alcaldía"

Los primeros pasos de Contigo/Zurekin se van a dar de forma paralela a los de Yolanda Díaz y Sumar. A estas alturas ella no ha confirmado que liderará ese espacio. ¿Eso no es un lastre para el propio proyecto?

–Yo no lo creo.

O un exceso de teatralización o de atrezo.

–Creo que la hoja de ruta que ella ha decidido seguir es escuchar a la ciudadanía, y ver si hay mimbres y un sentir ciudadano que a ella le aúpe o le haga tomar esa decisión. Es una hoja de ruta respetable.

¿Y si no los hubiese?

–Es que yo no tengo duda de que los va a ver. Yo entiendo que la única opción a día de hoy para el progresismo en España es Yolanda Díaz, ojo, un proyecto liderado por ella con el apoyo de todos los partidos a la izquierda del Partido Socialista.

Por eso, parece que el desenlace está ya escrito.

–Seguramente sí, pero yo sí que puedo entender la lógica de palpar más allá de los despachos si hay un apoyo real a pie de calle. En todo caso, como no puede ser de otra forma, es una decisión totalmente respetable, y yo la puedo entender lógica.

“Entiendo que Ucrania practica la legítima defensa”

Último tramo de entrevista a Begoña Alfaro, sobre la inflación, la guerra, el cambio climático y la energía. A su juicio, “este momento debería suponer un punto de inflexión para una apuesta real y clara de los Gobiernos por energías renovables, empresas públicas de energía y distintas medidas que ya hace muchísimo tiempo que los expertos y expertas apuntan necesarias y que estamos abocados a tener que adoptarlas”.

La inflación es una potente impugnación para un Gobierno que apuesta por la igualdad. En el Estado y en Navarra les puede dar quebraderos de cabeza como problema estructural.

–Sin duda esta legislatura ha sido todo menos tranquila. Ahora el nuevo problema al que se enfrenta el actual Gobierno, como bien dice, estructural y generalizado, es la inflación. Este jueves se anunció la subida de los tipos de interés por el Banco Central Europeo. El ciudadano o ciudadana va a tener que pagar más por su hipoteca. No puede ser que las consecuencias aparejadas a la inflación sean siempre paliadas a costa de los mismos. Hay muchas medidas a explorar, ojo, que ya otros países europeos las están adoptando, como la aprobación de nuevos tipos impositivos a grandes fortunas y eléctricas, que pueden ayudar a paliar las consecuencias de la inflación, y así se pueda seguir teniendo recursos para destinarlo a las personas sin ahogar a los de siempre.

Otra idea del documento político de Contigo/Zurekin es el pacifismo. ¿Ucrania practica la legítima defensa ante Rusia?

–(Lo piensa mucho). Entiendo que sí. Ucrania se está defendiendo de la invasión rusa, pero esto es un tema complejísimo. Nosotros vamos a apostar siempre por las vías diplomáticas. Esto se está prolongando ya mucho en el tiempo. Creo que nadie de quienes juegan un papel relevante en este conflicto internacional pensaba que fuera a ser un problema ni tan prolongado en el tiempo ni de tanta magnitud. Creemos que se tenía que haber hecho una apuesta mayor por las vías diplomáticas, ahora nos encontramos en la situación en la que nos encontramos, y a ver qué queda por venir, pero nosotros nos autodefinimos como un espacio pacifista, porque sí entendemos que la apuesta no tiene que ser incrementar el gasto en Defensa, sino apostar por las vías diplomáticas, cosa que en este conflicto no se ha hecho con la intensidad que se debiera haber hecho desde el inicio. – J.Barcos