La Junta de Portavoces dio ayer trámite a la ponencia para reformar el Amejoramiento que han planteado PSN, EH Bildu, Geroa Bai y Contigo-Zurekin. La propuesta se limita por ahora a abrir el debate, sin un texto concreto de reforma y con la advertencia de los socialistas de que no van a apoyar ningún cambio sustancial en el texto estatutario. La propuesta venía recogida en el acuerdo de Gobierno firmado para la investidura de María Chivite, e irá ahora al pleno para su aprobación y posterior apertura de las sesiones de debate en comisión. Un proceso que se prevé largo y donde será difícil, por no decir improbable, que se puedan alcanzar acuerdos de calado.
El PSN cumple así uno de los puntos pactados con sus socios de Gobierno, la creación de la ponencia, pero dejando “muy claro” que no apoyará ningún cambio en el estatus jurídico e institucional de Navarra. “Estamos dispuestos a hablar de cuestiones para adecuarlas a los nuevos tiempos. Pero hemos sido claros y meridianos, en cuestiones institucionales de símbolos o de lengua tenemos las cosas muy claras. Queremos a Navarra tal y como está”, reiteró ayer su portavoz, Ramón Alzórriz.
No habrá cambio por lo tanto en el ámbito de los símbolos. Ni tampoco en el ámbito lingüístico. Geroa Bai y EH Bildu reiteraron ayer su voluntad de que el euskera sea reconocido como lengua oficial en toda Navarra, pero esa es una raya roja para el PSN que ayer volvió a quedar clara. “Abogamos por fomentar las lenguas y promoverlas dentro de la realidad sociolingüística de nuestra tierra y en base a la voluntad de cada uno”, insistió Alzórriz, que se mostró dispuesto “a hablar de todo”, pero teniendo claro que el PSN “no va a pasar ciertas líneas”.
Apoyo de UPN
Es más, la reforma del Amejoramiento puede servir al PSN para marcar distancias con sus socios de Gobierno y situarse junto a UPN en el marco institucional de Navarra. No hay acuerdo posible entre ambos partidos en el ámbito de la gobernabilidad, pero sí en “la defensa de una Navarra foral diferenciada dentro de España” que UPN se comprometió a defender. “Estamos abiertos a analizar modificaciones técnicas, pero no vamos a permitir que este debate sea un cuestionamiento permanente de la realidad institucional de Navarra”, avanzó Javier Esparza, que ofreció “los 15 parlamentarios de UPN” para evitar que el PSN pueda llegar a un acuerdo con sus socios en esa materia. “No vamos a eludir el debate y vamos a ir a esa mesa y defender nuestra posición”, apuntó Esparza. Habrá por lo tanto ponencia estatuaria, pero con la promesa de UPN y PSN de blindar el marco institucional actual.
