El pleno del Parlamento de Navarra ha rechazado una moción de Contigo-Zurekin que instaba al Gobierno foral a que, en las bases de todas las convocatorias de ayudas y subvenciones públicas, se incluya una cláusula que las supedite al cumplimiento de la legislación vigente en materia de memoria histórica.

La moción se ha rechazado con los votos a favor de Contigo-Zurekin y EH Bildu, la abstención de PSN y Geroa Bai, y el voto en contra de UPN, PP y Vox.

El portavoz de Contigo-Zurekin, Carlos Guzmán, ha comentado al respecto que, tras la entrada en vigor de la ley foral de memoria histórica, de los 460 símbolos franquistas identificados en Navarra, más de 300 han sido retirados, pero hay otros muchos que se mantienen "a lo largo y ancho de la geografía foral".

Guzmán ha denunciado que hay personas físicas y jurídicas propietarias de inmuebles con simbología franquista que son perceptoras de ayudas o subvenciones públicas de diversa índole, lo que es "una aberración democrática".

Ha puesto en ese sentido el ejemplo de un escudo de Navarra con la laureada en la fachada de una bodega de Corella que ha recibido ayudas públicas y el de las placas del Instituto Nacional de Vivienda con el yugo y flechas de la Falange en muchos edificios.

Iñaki Iriarte, UPN, ha defendido una enmienda de sustitución, que no ha sido aceptada. Ha considerado que la moción "oportunísima" de Contigo-Zurekin "se quedaba algo corta", ya que "no solo hay que cumplir son la letra sino que hay que cumplir también con el espíritu de las leyes de memoria histórica".

Por ello, ha dicho, la enmienda insta al Gobierno de Navarra y los entes locales a realizar una condena de todas las dictaduras y todos los crímenes cometidos durante las mismas, incluidos "los que, me avergüenza, cometieron los miembros de UPN durante décadas".

La parlamentaria socialista Inma Jurío, quien ha defendido otra enmienda de sustitución que tampoco ha sido aceptada, ha instado a "transitar ese camino con seguridad jurídica" y "con mucho diálogo y mucho trabajo", porque las leyes de memoria "para lo que deben servir es para generar convivencia y, si generan confrontación, no van a servir para nada".

Por EH Bildu, Arantxa Izurdiaga ha asegurado que le "sorprende y preocupa" que todavía haya numerosos edificios públicos y propiedades privadas con simbología franquista, "con la tolerancia y permisividad del Gobierno de Navarra". Ha recordado al respecto que en la ley ya existe un régimen sancionador, que al parecer no está siendo aplicado.

Mikel Asiain, de Geroa Bai, tras resaltar que el mantenimiento de estos símbolos son "una afrenta para las víctimas y totalmente inadmisibles para toda persona que condena la violencia", ha apuntado que "no se puede arrastrar la memoria por el lodazal del partidismo". Ha anunciado la abstención de su grupo, ya que la posible aplicación de la moción les genera "muchas dudas".

La parlamentaria del PP Irene Royo ha cuestionado la intencionalidad de la moción y ha preguntado por qué no se insta también a que en ayudas y subvenciones se exija el cumplimiento de la ley tributaria, la ley de protección animal o la ley contra el cambio climático. "No podemos condicionar el reparto del dinero público conforme al cumplimiento de unas leyes y no otras", ha dicho.

Por parte de Vox, Maite Nosti ha declarado que, "después de que España ha sido un ejemplo de transición de la dictadura a la democracia", la ley de memoria democrática "no trae más que problemas a los españoles", ya que "atenta contra la Constitución, porque no trata igual a unas víctimas que a otras".