El Gobierno de Navarra comunicó este miércoles su conformidad a la toma en consideración de la proposición de Ley Foral de modificación de la Ley Foral 33/2013, de 26 de noviembre, de reconocimiento y reparación moral de las ciudadanas y ciudadanos navarros asesinados y víctimas de la represión a raíz del golpe militar de 1936.

Se trata de una iniciativa legislativa presentada por PSN, EH Bildu y Geroa Bai para avanzar en el pacto de resignificar el Monumento a los Caídos. La modificación propuesta tiene tres puntos. Por un lado, se considera que dicho edificio “refleja, incluso tras las exhumaciones y la eliminación de la mayor parte de la simbología propia de la época franquista, la propaganda totalitaria de exaltación al alzamiento fascista y al régimen franquista que le siguió”.

En segundo lugar, establece que “los usos vinculados a este monumento solo podrán destinarse a dar a conocer los motivos y circunstancias en que se produjeron las graves violaciones de derechos humanos ocurridos en la guerra y en la dictadura, así como a reflexionar y alertar a la sociedad sobre los riesgos de las nuevas formas de fascismo en cuanto que colisionan con la democracia, la diversidad y la justicia, poniendo en valor la convivencia y el respeto a los derechos humanos”.

Finalmente, como punto tercero, la disposición adicional establece que “se deberán retirar aquellas partes simbólicas que supongan la exaltación de la victoria del régimen franquista y ocultar las pinturas del interior de la cúpula”.

El apoyo del Ejecutivo a esta reforma llega solo un día después de que la Agrupación de Asociaciones memorialistas por el derribo de los Caídos pidiera en el Parlamento que esta reforma no se tramite por la vía de urgencia y se abra un debate sobre el cuestionado edificio.