Los actos del Partido Carlista en Montejurra comenzaron con un contratiempo al encontrarse rotos varios de los símbolos en el monolito en recuerdo de Ricardo García Pellejero y Aniano Jiménez Santos, asesinados en Irache hace 49 años. “Hemos tenido suerte de no encontrarnos con ellos”, aseguraba el secretario general del partido, Lázaro Ibáñez, “porque no sé cómo hubiéramos reaccionado”.
Un incidente que puso en alerta a los asistentes y que fue denunciado ante la Policía Foral, que ya manejaba un vídeo de los dos presuntos asaltantes tras realizar los hechos a primera hora de la mañana. Pero con todo, el programa del PC ya arrancó, como es costumbre, el pasado sábado con la presentación de la publicación Antifranquista de boina roja, del historiador Juan Carlos Senent, en el Círculo Carlista de Estella-Lizarra, una de las sedes históricas de este partido en Navarra. La jornada del domingo se trasladó hasta Irache, donde Lázaro Ibáñez Compains, acusó al Gobierno de Navarra por su complicidad y blanqueamiento del fascismo “que supone el mantener la versión franquista de los Sucesos de Montejurra de 1976: uno de los mayores crímenes del estado español en Navarra”.
Blanqueamiento
“Prefieren el blanqueamiento del fascismo, antes que reconocer al Partido Carlista como víctima de una operación criminal cometida y amparada por las más altas instancias del estado español”. Con todo, Lázaro Ibáñez aseguró que próximamente “se demostrará documentalmente lo que hemos denunciado desde el minuto uno”. En el acto se rindió homenaje a los fallecidos del Partido Carlistas y se pidió “verdad, justicias, reparación y desclasificación”.
Lucha contra el fascismo
Posteriormente, en la campa a los pies de Montejurra, en las cercanías del Complejo de Irache, se realizó un acto que contó con la presencia de Jesús María Aragón y representantes del Frente Polisario. En el mitin central se habló de la lucha contra el franquismo en Navarra “aquí, en esta tierra y en esta campa, se ha luchado muy duro contra el franquismo y el fascismo”. Se recordó a los compañeros asesinados en 1976, Ricardo García Pellejero y Aniano Jiménez Santos y se condenaron otros “criminales atentados” como los del 3 de marzo en Vitoria, los de la calle Atocha de Madrid o los de San Fermín de 1978.
“Fueron hechos cometidos por el estado español, con el objetivo de romper el movimiento popular”. En el acto se pidió el desarme y la paz y se recordó tanto al recientemente fallecido Papa Francisco, como al pueblo Saharaui, que contó en el acto con dos representantes, “por su lucha en estos 50 años de dictadura de Marruecos y la traición de España a sus compromisos”.