Desde la Clínica Universidad de Navarra hacen referencia a la retención de líquidos, también conocida como edema, hace alusión a la hinchazón causada por la acumulación excesiva de líquido en los tejidos del cuerpo. Puede ser el resultado de problemas cardíacos, renales o hepáticos, entre otros. Esta acumulación puede ser localizada o generalizada y puede manifestarse en diferentes partes del cuerpo, desde las extremidades hasta regiones como el abdomen.
La acumulación puede ser localizada o generalizada y puede manifestarse en diferentes partes del cuerpo
Según relatan los especialistas, "la acumulación de líquido es más evidente en las regiones del cuerpo donde abunda el tejido laxo como son los tobillos, los párpados y la zona sacra. La piel sobre la zona hinchada puede estar estirada o brillante. Si se presiona con el dedo deja una huella o fóvea que desaparece lentamente. Los edemas pueden tener una distribución local (tobillo o pierna), regional (toda una extremidad) o generales. Los edemas inflamatorios, en contraste con los demás, son dolorosos, calientes y rojizos".
Los alimentos de temporada para combatir la retención de líquidos que recomienda Pablo Ojeda
En esa misma línea, desde la Fundación Española del Corazón señalan que "el tratamiento dietético en los edemas consiste en una dieta baja en sodio. Las principales fuentes de sodio son la sal de mesa, los alimentos y el agua. Como primera medida, se evitará el agregado de sal en las comidas, puesto que , como la sal 'atrae' el agua, cuanta más sal se consuma, más agua se retendrá. En su lugar, se utilizarán hierbas, especias, limón, vinagre y aceites aromatizados con ajo, orégano o guindilla para potenciar el sabor de las comidas".
"Ahora en primavera cuando suben las temperaturas hay mayor retención de líquidos. Alimentos como los que se dan ahora en primavera de frutas y verduras, muy ricas en vitaminas, minerales y sobre todo que sean diuréticas, nos vienen muy bien para esas retenciones de líquidos y el níspero es perfecto para ello. Al igual que la piña. Empiezan las cerezas, fresas...todo muy sabroso y muy rico en antioxidantes. También son muy interesantes las espinacas, los guisantes y las zanahorias. Es necesario consumir esto en primavera, porque tiene el punto óptimo nutricional, porque es mucho más sostenible, porque están mejor de sabor y porque están mucho más baratitas", explica de manera detallada el nutricionista Pablo Ojeda. f