Aunque la normativa de hostelería ya recoge que las actividades deben realizarse dentro del local, el Ayuntamiento de Pamplona este año, como ya hizo en 2019, se ha mostrado rotundo e inflexible con los bares en San Fermín y ha recordado a los establecimientos del centro que, aunque se les permita estar abiertos hasta las 6 de la mañana, desde las 2.00 y hasta las 6.00, la actividad se tendrá que desarrollar con la puerta y las ventanas cerradas como un fin de semana normal. Las 2 de la madrugada es el límite que se ha dado para la música de los DJ en las sesiones de noche de la Plaza del Castillo (aunque el horario para las barras, según el condicionado, es de 10.00 y hasta las 2.30), y, según fuentes del sector consultadas, la idea es que se traslade esto al resto de las calles, de tal manera que no se emita música al exterior de los locales de hostelería, es decir que tengan hasta las ventanas cerradas. Hay que señalar que no ocurre así con otras zonas de la fiesta. En Antoniutti, por ejemplo, se establece en el condicionado que la programación musical será en sesiones de tarde, de 19 a 22 horas, y por las noches, “de 23.30 a 03.00 horas”, aunque “en ningún caso, se podrá superar las 03.00 horas en la emisión de sonido”, se dice, y en el Ferial de la Runa, por ejemplo, también el límite de emisión de sonido es algo mayor, y aunque pueden funcionar de 12.00 a 6 de la mañana, a partir de las 3 de la madrugada la música “debe cesar”.

Aunque históricamente siempre se había hecho un poco vista gorda con este tema, ya en 2019 comenzaron las sanciones y, según las mismas fuentes, se interpusieron 65 multas. El sector ya teme que este año pueda ser peor.