Debutaron en 2019 y volaron en el encierro más rápido de fiestas, con un tiempo de 2’12”. Los toros de la ganadería gaditana de La Palmosilla, cuatro negros y dos colorados, han repetido esquema esta mañana y han completado el recorrido en dos minutos y 29 segundos. Un poco más remolones que en su primera cita con Pamplona, y aún así la carrera más veloz en lo que llevamos de San Fermín. Con un segundo de ventaja respecto a los escolares del sábado. 

Han sido 149 segundos sin cornadas porque a los palmosillas no les ha dado la gana. Les han sobrado las oportunidades de hacer daño, peligro que da sentido al madrugón de corredor y espectador y justifica el interés mundial de la carrera. El fantasma de la tragedia sobrevolando siempre la escena aunque luego no pase nada, como recordaba esta semana Javier Solano, la voz del encierro por mucho que se jubile.

Al final, la mañana se ha saldado con cuatro traslados a centros hospitalarios, todos por distintas contusiones leves en Mercaderes, Estafeta y Telefónica (2). Un caos imprevisible perfectamente controlado con dosis justas de dolor y una tregua merecidísima para los equipos sanitarios, que bastante tute llevan encima. 

En el pan nuestro de cada fin de semana, una masificación brutal con mucha pelea para hacerse un sitio en la cara del toro y carreras espectaculares pese a la durísima competencia, los astados han dejado varias imágenes que presagiaban cornada. Un mozo de camisa blanquivioleta se ha llevado a un toro al suelo, con su brazo enganchado al pitón; otro en Telefónica arrollado por los 530 kilos del negro burraco Sombrerito, muy noble y sin buscar la embestida; o un corredor caído en el callejón que ha decidido levantarse al instante, justo cuando de cara venía un morlaco que se lo ha llevado por delante. De nuevo, sin herida por asta. La nobleza del animal y su entrenamiento, la labor de los mansos, la preparación del corredor, el antideslizante, el capotico del Santo o simple y pura chiripa. Que cada cual busque la explicación donde le plazca, pero poco pasa para lo que podía pasar. De eso no hay duda.

la carrera Los mansos de Macua se han aprendido muy bien el camino en los cuatro encierros que acumulan en las patas y enfilan con brío Santo Domingo. Han corrido por delante con los toros cediendo protagonismo, bien hermanados hasta llegar a Mercaderes. En la curva con Estafeta ningún morlaco ha tropezado –no han tocado ni la pared– y a partir de ahí la manada se ha estirado. 

Los animales bravos han tirado del carro y las buenas carreras se han sucedido. Y las caídas. Muchos mozos se han ido al suelo, también un toro y un cabestro al que le ha pasado por encima la torada. El bicho descolgado, arrastrado al adoquín por un mozo, ha llegado a los corrales de la Plaza diez segundos más tarde que sus hermanos, sin perderles de vista y completando, tropezón incluido, una carrera rapidísima. Sin incidentes a destacar. Encierro rápido y limpio, palabras que suenan desgastadas de tanto usarlas. Así van pasando las mañanas de fiesta, rápidas y limpias, una detrás de otra. Prácticamente un copia/pega de los tres encierros que le precedían este 2022 y los de los últimos años. Y que siga la racha porque en el horizonte cercano ya asoman la pata Cebada Gago y Jandilla, protagonistas lunes y martes. A nadie se le escapa cómo se las gastan.

Una multitud espera a que comience el cuarto encierro de San Fermín. Unai Beroiz

La ganadería

Debutó con éxito en 2019 y regresa con merecimiento. Su movilidad y poder sorprendió y superó a algunos toreros. Se repartió los premios con Núñez del Cuvillo, que es su hierro matriz. Se espera con interés el regreso de estos toros que tendrán enfrente a una terna variada. Encabeza el cartel Rafaelillo que regresa por méritos propios y con el recuerdo de la grave cogida un toro de Miura en la última corrida de 2019. Sería muy justo que el murciano fuera bien recibido. Escribano, maduro y bien en Madrid, pondrá en escena su amplio repertorio. Cierra la terna el debutante mexicano Leo Validez, que es banderillero. Competirá y, quizá, compartirá algún segundo tercio con Escribano.

TEMPORADA 2022

ha lidiado entres novilladas picadas. Y tres toros en Navas del Rey y una exitosa corrida en Torrejón con Ginés Marín y Téllez, a hombros.

LOS TOROS DE ESTE DOMINGO

Los 8 toros cinqueños en el Gas han dado una media de 516 kilos. Cuatro negros y 4 colorados.

En el encierro

Primero y único: 13/7/2019. Fue el más rápido aquel año: 2m. y 12 sg. El castaño Diligente, a toda pastilla, lideró la vacada.

  • Divisa. Azul celeste y roja.
  • Señal. Muesca en la oreja derecha y orejisana en la izquierda.
  • Antigüedad. 3 de mayo de 2013.
  • Finca. La China , en Tarifa (Cádiz).
  • Propietario. Javier Núñez Álvarez.
  • Procedencia. Osborne vía Joaquín Núñez del Cuvillo.
  • Presencias. 1
  • Premios. 1, Carriquiri en 2019 con ‘Tinajón’.

Sombrerito Javier Bergasa

Nº 7. SOMBRERITO. Negro burraco. 530 kilos. Nacimiento: Septiembre/2016. Guarismo 7. Cinqueño.

Pueblerino Javier Bergasa

Nº 20. PUEBLERINO. Negro . 530 kilos. Nacimiento: Octubre/2016. Guarismo 7. Cinqueño.

Vinatero Javier Bergasa

Nº 32. VINATERO. Negro. 525 kilos. Nacimiento: Enero/2017.. Guarismo 7. Cinqueño.

Arrumbadido Javier Bergasa

Nº 76. ARRUMBADITO. Colorado algo chorreado en verdugo meano. 500 kilos. Nacimiento: enero /2017. Guarismo 7. Cinqueño.

MEMORABLE Javier Bergasa

Nº 59. MEMORABLE. Negro listón bragado meano corrido axiblanco.. 505 kilos. Nacimiento: Enero/2017. Guarismo 7. Cinqueño.

Remilgado Javier Bergasa

Nº 74. REMILGADO. Colorado. 505 kilos. Nacimiento: Enero/2017. Guarismo 7. Cinqueño.