pamplona. El vocablo compromiso no vive tiempos de bonanza en la Comunidad Foral. Basta con revisar las últimas cifras recopiladas por el Tribunal Superior de Justicia de Navarra (TSJN) sobre divorcios, separaciones y nulidades para cerciorarse de tal declive amoroso: según las 1.474 sentencias dictadas sobre este asunto por los juzgados navarros, al día se rompen una media de cuatro enlaces matrimoniales. Es decir, casi la mitad de las parejas que deciden formalizar su situación "para siempre" terminan distanciándose antes de cumplir dos lustros de convivencia -la duración media de un casamiento ya es de sólo 11,5 años-.
Por este motivo, y con el objetivo de encontrar a su anhelada media naranja, cada vez son más las personas que tantean al amor de una forma profesionalizada. Las cifras lo dejan muy claro: más de 1.600 navarros y navarras recurren en la actualidad a la ayuda "experta" de una agencia matrimonial. Un servicio "en auge, competente y no engañoso en el que se vende un sueño posible para muchas personas", afirma la psicóloga Alicia López, responsable de la Agencia Lazos.
parejas estables Desde el año 1998 -fecha en la que la citada empresa comenzó a trabajar dentro del territorio navarro-, unas 800 personas (400 parejas) han hallado a la persona de su vida gracias a las labores celestinas de Lazos. "El truco, si es que existe, reside en concertar citas entre los clientes que comparten un proyecto común, tienen estilos de vida similares, gustos parecidos... Todo orientado a que salte la famosa chispa, pero siempre después de haber mantenido con ellos una entrevista en profundidad", destaca López, tras aclarar que "algunas veces los clientes vienen con una imagen sobre sí mismos que no se corresponde con la realidad".
"Algunos piensan que son extrovertidos, cuando realmente pecan de vergonzosos; otros creen que su modelo ideal de pareja es una persona similar al primer amor de la juventud, cuando con quien realmente pueden compaginar a la perfección es con otro tipo de gente, etc", añade la psicóloga.
Además, la responsable de Lazos en la Comunidad Foral censura la opinión que aún mantiene buena parte de la sociedad en torno a las personas que solicitan los servicios de este tipo de agencias. "Muchos creen que a las empresas de contactos sólo acuden los míticos solteros o solteronas, aquellos que están muy desesperados, los feos de la cuadrilla, los orcos... Y la verdad, se equivocan. La realidad no se corresponde para nada con esta percepción. A nuestro gabinete acuden personas totalmente normales, como cualquiera de nosotros. Enamorarse a día de hoy resulta muy difícil y, por ello, nuestros usuarios proceden de distintas profesiones (funcionarios, maestros, empresarios, profesoras) y su edad es muy variada", asegura.
de 25 a 60 años En concreto, Alicia López destaca que la mayoría de los clientes se ubican entre los 25 y los 60 años. "Hasta nuestras oficinas también acuden personas por debajo de los 24 y otras que superan los 60, pero lo cierto es que el grupo de clientes más fuerte está formado por adultos de entre 30, 40 y 50 años. Navarros y navarras solteros, divorciados o separados que tienen una posición social media-alta y que comparten la ilusión por encontrar pareja", clarifica la psicóloga, tras aclarar que "el 50% de ellos son hombres y el otro 50% mujeres".
En cuanto al impacto que la delicada situación económica ha generado en este tipo de empresas, López afirma que "lejos de hundir el negocio, la crisis ha elevado hasta un 10% las inscripciones en muchas agencias matrimoniales". ¿El motivo? "Al igual que ocurrió en EEUU tras la caída de las Torres Gemelas, cuando llegan tiempos difíciles y lo material pasa a un segundo plano, las personas dan mayor importancia al tema de los sentimientos. Se dan cuenta de que desean compartir el día a día con alguien, buscan apoyo en un novio, marido, mujer, compañero. En definitiva, suspiran por una pareja que les acompañe en los malos momentos", concluye la responsable de Lazos en Navarra.