MADRID. "Ministerio del Cementerio Nuclear, Industria, Turismo y Comercio" es el nuevo nombre que ha lucido la fachada del Ministerio dirigido por Miguel Sebastián junto a un gran símbolo nuclear dorado, situado a la izquierda del rótulo antes de que fuese desmantelado por agentes de la policía.

Greenpeace considera que, en la actual legislatura, el Gobierno ha llevado a cabo una política de apoyo explícito a la energía nuclear y al resto de energías sucias, como el carbón. Además, ha emprendido una intensa campaña de acoso y derribo a las energías renovables, liderada por el ministro Miguel Sebastián, ha indicado a EFE un portavoz de la ONG conservacionista.

Según miembros de la organización ecologista, no está justificada ni la urgencia ni la necesidad del "cementerio nuclear" -Almacén Temporal Centralizado (ATC) de residuos de alta actividad- puesto que varias centrales aún tienen capacidad de almacenamiento en sus piscinas, y las otras cuentan con almacenes temporales individualizados (ATI).

Asimismo, Grenpeace defiende que el ministro Sebastián no tiene intención de cumplir el compromiso de poner en marcha el prometido plan de cierre de las centrales nucleares.