pamplona. El Estudio Médico Navarro, EMN dirigido por Antonio Laiz cuenta con una larga trayectoria en el campo de la reproducción asistida. Este año celebra su 25 aniversario y actualmente cuenta con más de veinte especialistas, entre ellos ocho ginecólogos, tres urólogos y biólogos permanentes. "Nosotros recibimos a las pacientes que no consiguen quedarse embarazadas con el fin de buscar la causa. Realizamos un seminograma, un estudio hormonal y un estudio de las trompas de Falopio. Después, determinamos cuál es el tratamiento más adecuado para la pareja", explicó Laiz. Por otro lado, el director también señaló que el centro es el único que ofrece en Navarra el estudio IMSI, proceso que consiste en analizar el esperma del hombre y elegir los que tengan mejor morfología. "Tendrán mayor carga cromosómica, lo que será favorable para el tratamiento de fertilidad", comentó el experto. Otro de los análisis de fertilidad masculina que se realizan en el EMN es el FISH. "Se trata de analizar los espermas y seleccionar aquellos cuyo cromosoma no esté dañado", señaló Laiz.
tratamientos Tal y como señaló Ricardo Ezcurra, coordinador de los centros de Atención a la Mujer en Navarra, hoy en día, la sanidad privada de la Comunidad foral ofrece todo tipo de tratamientos de fertilidad. La fecundanción in vitro y la inseminación artificial se practican tanto en el Servicio Navarro de Salud-Osasunbidea como en los centros privados. Pero hay tres prácticas que marcan la diferencia con la sanidad pública y que se practican en el Estudio Médico Navarro. Por un lado, el DPG, a espera de la Ley que pretende impulsar Vera, y por otro, la ovodonación o donación de óvulos y su vitrificación. Esta última práctica consiste en la congelación de los óvulos de la mujer. "Una mujer joven que, en ese momento, no tiene intenciones de quedarse embarazada, puede conservar sus óvulos jóvenes para que, cuando tenga más edad, pueda tener hijos con esas células", comentó Ezcurra. "El tratamiento que más se utiliza es el de la in vitro. Es más agresiva y más cara y, si es posible, aplicamos la inseminación, pero es el tratamiento que más éxito tiene", señaló Jesús Zulategui, embriólogo de Virgen del Camino y asesor científico de EMN.
Por otro lado, Ezcurra señaló que en el Estado, entre un 15% y 20% de las parejas acude a uno de los tratamientos de fertilidad. "Este porcentaje va en aumento, también en Navarra porque sobre todo debido a la situación laboral, las mujeres deciden ser madres cada vez más tarde", explicó. Zulotegui añadió que también hay causas ambientales que fomentan su aumento, como lo denominado como cultura del plástico, que hace referencia a toda la contaminación producida por este material y "que también afecta a la calidad del semen", señaló, el biólogo.
perfil "Atendemos a todas aquellas mujeres que quieren quedarse embarazas pero no lo consiguen y que, además, buscan una atención más directa", apuntó Laiz, que también destacó que ha habido un aumento notable de las parejas que solicitan estos tratamientos, sobre todo, la in vitro. "Además, son personas de cada vez más edad. Recuerdo que, cuando yo empecé a trabajar en la consulta en 1984, acudían mujeres entre 28 y 32 años", explicó Laiz. Hoy en día, según el doctor, la edad de las mujeres que acuden al EMN se sitúa entre 38 y 45 años. "Esto también tiene que ver con la situación laboral de la mujer y con el hecho de que haya perdido el miedo ha acudir a estos centros. El límite de edad para realizar estas prácticas se 50 años, sobre todo por cuestiones de salud de la mujer y también porque así lo indica la ley ", comentó el director.
Por otro lado, la vitrificación es una técnica ofrecida por el centro y cada vez más solicitada por las mujeres jóvenes. "Ellas quieren retrasar su maternidad y congelan de sus óvulos jóvenes, para conservalos y, cuando decidan ser madres, recurrir a ellos con el fin de aumentar las posibilidades de éxito del embarazo", concluyó Laiz.