pamplona. La mayoría de las empresas de jornada continuada siguen un patrón parecido para que esta hora extra afecte lo menos posible al ritmo de trabajo. "Nuestros turnos son de ocho horas, pero hoy toca trabajar una hora más. Este tiempo se ve compensado con el cambio de horario de primavera en el que el turno de noche tiene siete horas", comentó Iñaki Zozaya, trabajador de una gasolinera de Villava. Puede que este cambio no afecte al plan de horas de las empresas, pero los trabajadores sí que notan sus consecuencias. "Al final estás de servicio más tiempo de lo normal, y el cuerpo lo siente. Pero pensando con optimismo, cuando toque adelantar el reloj, el turno será más corto", añadió Zozaya, que destacó que el horario de otoño incide en la actividad de la gasolinera, ya que "durante verano, mucha más gente para por las noches a repostar o a comprar".
