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Padre de una hija, amante de la música y "un buen chico"

Alex Sarria Carlos, el menor de tres hermanos, nació en el barrio de Santa María la Real y cantaba en verano en orquestas

Padre de una hija, amante de la música y "un buen chico"Foto: D.N.

pamplona - Alejandro Sarria Carlos, más conocido como Alex, era el hermano pequeño de los tres que formaban la descendencia de una familia obrera que ha hecho toda su vida en el barrio de Santa María la Real, muy próximo a Arrosadía, donde se encuentra el piso de la Travesía Guelbenzu en el que Alex perdió la vida. Han pertenecido de siempre a las antiguas pisicnas de Educación y Descanso, actuales Guelbenzu. Los que le conocen hablan muy bien de Alex, sobre todo como un buen chico, "con un buen corazón", y también como "un muchacho muy extrovertido, que hablaba con todo el mundo". En este sentido, sus vecinos de travesía Guelbenzu, aunque no llevaba mucho tiempo viviendo allí, le recuerdan como "un chico simpático, que siempre tenía buenas palabras". Por las fatalidades que muchas veces no vienen solas el joven pamplonés, de 33 años, había perdido hacía escasos meses a su madre y ahora su familia tiene que aguantar esta nueva tragedia. Además, el joven tenía una hija de unos 8 años de edad, fruto de una relación con su compañera Carmen. Alex, que estudió en el colegio José Vila, llevaba varios meses viviendo de alquiler en el piso en el que perdió la vida y, según varios amigos cercanos, había trabajado como pintor y era muy aficionado a la música, tanto que incluso solía pasar los veranos trabajando como cantante en varias orquestas de la Comunidad Foral que solían contar con sus servicios. Igualmente era un gran aficionado a la música latina y también era un aficionado al fútbol y tenía un equipo como pasión, el Fútbol Club Barcelona.

El piso que compartían era alquilado por Alex, según fuentes cercanas, y allí convivía con el presunto autor de las puñaladas que le causaron la muerte, al que habían conocido poco tiempo antes, y con otro joven de origen boliviano. En principio era un piso frecuentado por "bastante gente joven", según los vecinos, pero "tampoco era un lugar en el que se oyeran muchas discusiones. Era un piso de lo más normal en ese sentido", afirmaron algunos de ellos.

Durante el día de ayer, en el barrio de Arrosadia, los vecinos recordaban la figura de Alex y la desgracia que se llevó por delante su vida. Los funerales por su descanso se celebrarán mañana a las 20.30 horas en la parroquia de San Enrique, del barrio de Santa María la Real, donde nunca olvidarán a un chico como Alex, que creció allí y al que seguía muy vinculado. - E.C./N.P.