"Lo más importante es el apoyo de tu familia, que estén pendientes de cómo llevas los estudios y que intenten ayudarte", comenta Marina Almagro, una de las estudiantes de segundo de Bachiller con mejor nota en la Prueba de Acceso a la Universidad. Como ella, el ablitense Víctor Antón Modrego, que, si no aparece otro competidor, ha logrado la nota más alta (13,37 de un máximo de 14) también reconoce la importancia de los apoyos, familiar y docente. En estos detalles coinciden las demás estudiantes que se han colocado entre el alumnado triunfador este año de la prueba que les abre las puertas de la universidad.
María Garralda matiza, "fue muy importante el apoyo de mi entrenadora". "Además es importante que te ayuden a llevar una buena alimentación y que cumplas los ciclos de sueño necesarios para que no te den bajones", puntualiza Paula Amorena. Leire Artal insiste en que el apoyo es fundamental en "la semana de exámenes, cuando tienes poco tiempo, y se agradece la ayuda que te ofrecen y, sobre todo, los ánimos que recibes porque fortalecen tu seguridad".
Así se muestran de convencidas las cuatro alumnas, de diferentes colegios e institutos de Pamplona, al hablar del apoyo recibido por sus más allegados en el ultimo año de instituto, "el más duro de todo el ciclo educativo", una dificultad que a Víctor Antón, desde Tudela, le hizo apartarse de otras actividades, como los deportes. Todos ellos, no obstante, han demostrado que la Selectividad es un proceso difícil pero no imposible.
nervios y concentración Hasta el último momento, Víctor Antón estuvo convencido de que no le iba a dar tiempo a prepararse la Selectividad. Sin embargo, su nota, la más alta obtenida por un alumno en Navarra este año (13,37 puntos sobre 14), certifica que las ideas que le rondaban por la cabeza antes de la prueba eran solo producto de los nervios. "Me estreso mucho con ese tema, siempre tengo la idea de que no me va a dar tiempo", reconoce. Natural de Ablitas y alumno del IES Benjamín de Tudela, desde donde apuntan que "toda la promoción en general ha sido fabulosa", se enfrentó a los exámenes con la idea de obtener una nota alta para poder acceder a Medicina. "Es lo que he querido siempre, buscaba una nota alta y esperaba conseguirla, pero no tanto, me llevé una sorpresa", dice.
En cuanto a todo el proceso que ha precedido a este excelente final de curso, Víctor Antón explica que "estudiaba toda la mañana y cuatro horas por la tarde", renunciando este año a cualquier tipo de deporte o afición, concentrado en su objetivo. "Los profesores nos han ido preparando muy bien durante todo el curso, los exámenes son tipo Selectividad, te hablan continuamente de esa prueba y más o menos llegas preparado", considera agradeciendo a su familia la tranquilidad que le han intentado transmitir durante este tiempo. "Mi hermana mayor ya había pasado por esto y me decía que no me agobiara, que no era para tanto", recuerda. Aunque no va a afectar a sus planes de matricularse en Medicina en la Complutense el año que viene, Víctor Antón ha reclamado, como han hecho otros alumnos de numerosos centros, una segunda corrección del examen de Historia, una asignatura en la que las calificaciones han causado un amplio descontento este año. "Puntuaron a la baja. Yo tenía todo nueves y dieces, y saqué un 7,75 en Historia. No me quejo porque no es una mala nota, pero es curioso porque es el examen del que más contento salí y en el que pensaba que iba a tener una mejor nota".
María Garralda del Villar, residente en Mutilva, y alumna de Jesuitas superó la prueba de selectividad con un 12,25 sobre 14. "Quería hacer Medicina en la Univesidad de Navarra y lo he conseguido", afirmó ilusionada. Un factor importante es "seguir con tu vida, buscaba nota porque quería entrar en Medicina pero sin centrarme solo en los estudios, durante el curso también he dado clases, he hecho atletismo, voluntariado... si te organizas te da tiempo a todo, pero tengo que admitir que a mi se me quedan las cosas muy fácil", aclaró.
Paula Amorena Villanueva, alumna de la Ikastola San Fermín, vecina de Iturrama y con un 10,55 en Selectividad explica que solo se presentó a la parte específica porque quiere estudiar Psicología "y desde hace dos años es una carrera de Ciencias y yo soy de Sociales, por lo que las específicas no me ponderaban nada". "Espero que con esta media pueda entrar en alguna universidad de Madrid, que es a donde quiero ir". Paula también coincide con María en "la importancia de no abandonar actividades que te ayuden a desconectar de los estudios", como el baloncesto, deporte que ella practica. "Hacer deporte es vital, te ayuda a despejar la mente, es cuestión de organizarse", matiza.
Leire Artal Villa perteneciente al IES Zizur obtuvo un 12,7 en la prueba de Selectividad. "Nunca he tenido ninguna vocación, no tenía claro qué es lo que quería estudiar pero al final me he decidido por Ingeniería de Telecomunicaciones, es una decisión muy importante y tenía que valorar todas las opciones antes de tomar una decisión", explica acerca de su futuro. Leire destaca que "el problema no es que haya mucho temario sino poco tiempo".
Una gran sorpresa se llevó la estudiante de Plaza de la Cruz, Marina Almagro Bacáicoa, alumna de Bachiller de Humanidades que logró un 12,8 en Selectividad. "No he ido a pillar nota, voy a intentar estudiar Diseño de moda en Madrid, Barcelona o en el extranjero, y para ese grado solo necesitaba aprobar", expuso. "El curso se me ha pasado rápido pero es duro, aunque si lo llevas al día se puede sacar sin problemas".
Las cuatro estudiantes coinciden en que la prueba de acceso a la universidad es fácil comparada con 2º de Bachillerato, el curso más difícil y estresante del ciclo estudiantil, pero que "con organización se puede aprobar".
selectividad La Prueba de Acceso a la Universidad consta de dos partes: una obligatoria y otra específica. En la parte obligatoria el máximo de puntos que pueden alcanzarse es de 10, y la parte específica sirve para poder alcanzar hasta 14 puntos con materias elegidas por los estudiantes para subir nota.
Este año la prueba ordinaria de Selectividad ha finalizado con un récord de aprobados, 96% aptos, un porcentaje casi un punto superior al del pasado año (95,16%). Destacan notablemente los números logrados por los 664 estudiantes del modelo D (euskera) con un porcentaje de aprobados que asciende al 98,19%. Por contra, tan sólo 104 estudiantes no consiguieron superar la prueba y podrán probar suerte en la convocatoria extraordinaria que tendrá lugar el 25, 26 y 27 de junio en el campus de la UPNA.