Las defensas niegan la planificación y el “sesgo terrorista” en Alsasua al apreciar un “encontronazo fortuito”
Solicitan la libre absolución de los acusados al considerar que no ha quedado acreditada su participación Niegan que lo ocurrido encaje en un delito pensado para los “lobos solitarios”
MADRID/PAMPLONA - Los abogados de cuatro de los ocho jóvenes acusados de agredir a dos guardias civiles y a sus parejas en un bar de Alsasua solicitaron ayer su libre absolución al sostener que no ha sido acreditada su participación en los hechos, que a su juicio se corresponden con un “encontronazo fortuito” en un contexto festivo, que no responde a una estrategia premeditada y en el que “no se aprecia ningún sesgo o naturaleza terrorista”.
Tras un parón de una semana, la vista por el caso Altsasu se reanudó ayer en la Audiencia Nacional con la exposición de los informes por parte de las defensas de los encausados, que se enfrentan a una petición de penas por parte de la Fiscalía de entre 12,5 y 62,5 años de prisión por lesiones y amenazas terroristas, delito de atentado a la autoridad y lesiones por los hechos ocurridos en la madrugada del 15 de octubre de 2016 en el bar Koxka de la localidad alsasuarra.
Amaia Izko, abogada de Jokin Unamuno y Ainara Urkijo, para quienes la Fiscalía pide 50 y 12,5 años de cárcel respectivamente, destacó que lo ocurrido tuvo lugar a “altas horas de la madrugada, en un entorno festivo” y se trató de un “episodio fortuito, casual”. “Son unos hechos aislados, no enmarcados en una estrategia violenta, que surgen tras una discusión sobre si los agentes debían o no estar en el bar por su condición de guardias civiles”.
Izko, que admitió que los hechos tuvieron “unas consecuencias lesivas de menor entidad” que “para un observador ajeno no tienen ningún sesgo o naturaleza terrorista”, recordó que a sus clientes se les atribuye el carácter terrorista recogido por la última reforma del Código Penal, pensada para los conocidos como “lobos solitarios” del terrorismo yihadista y que en su opinión no es aplicable a este caso porque los hechos no se enmarcan en una “estructura organizada que ataca directamente a los cimientos del Estado”.
INTERPRETACIÓN EXTENSIVA A su juicio tampoco se puede acudir a la definición del artículo 573 del Código Penal de terrorismo como algo que provoca un “estado de terror en la población” solo porque los agredidos sintieran “miedo, pánico o terror”. “Incardinar los hechos en este tipo penal supone forzar los límites de este precepto y apostar por una interpretación extensiva y expansiva del concepto de terrorismo”, afirmó Izko, que rechazó la tipificación de lo ocurrido como lesiones terroristas, amenazas terroristas o desórdenes terroristas y afirmó que lo ocurrido encaja mejor en un “encontronazo fortuito”.
La abogada descartó también el terrorismo porque el movimiento Ospa (Fuera) de expulsión de las fuerzas de seguridad del Estado de la CAV y Navarra, en el que la Fiscalía enmarca los hechos, no ha sido denunciado por el propio Ministerio Público como un movimiento terrorista. Para la letrada, “sean de mejor o peor gusto” las actividades que se han venido programando en el Ospa Eguna de Alsasua desde 2012, son “denuncias por las actuaciones” de la Policía Foral o de la Guardia Civil, que se consideran “abusivas”, pero recalcó que se han celebrado siempre “sin ejercer violencia”.
Para Izko, tampoco el movimiento que la Fiscalía sitúa como antecesor de Ospa, Alde Hemendik (Fuera de aquí), es parte de la estrategia de ETA, y si es así, no se ha probado en el juicio, y defendió que son movimientos de “denuncia de actuaciones de la Guardia Civil, de la Policía Foral y de la Policía Nacional que se consideran represivas y abusivas, o excesiva su presencia”. Asimismo, rechazó la tesis de la Fiscalía de que la estrategia de ETA sigue presente, ya que contrasta con “la terca realidad política y sociológica que se vive en el País Vasco y en Navarra, y en el resto del Estado español”.
El juicio finalizará hoy. Hoy se celebrará la décima y última sesión del juicio En ella expondrán sus informes tres abogados que ejercen la defensa de los cuatro acusados restantes (Adur Ramírez de Alda, Aratz Urrizola, Iñaki Abad y Jon Ander Cob).
12,5
años de prisión. Ainara Urkijo se enfrenta a 12,5 años de prisón por amenazas terroristas.
50
AÑOS DE PRISIÓN. Pena solicitada por la Fiscalía para Adur Ramírez de Alda, Aratz Urrizola, Iñaki Abad, Jokin Unamuno, Jon Ander Cob, Julen Goikoetxea.
62,5
AÑOS DE PRISIÓN. Condena que se pide para Oihan Arnanz.
Más en Sociedad
-
El cortometraje 'Apuesta Segura' del IES Padre Moret-Irubide, premiado en el Festival de Cine Educativo de Elche
-
Cruz Roja Navarra trabajó en 2024 con 493 personas mayores en riesgo de maltrato
-
Trabajadores del COA de Marcilla, preocupados por la escalada de la tensión social: “Se está proyectando una imagen distorsionada de los menores”
-
El abogado navarro que lideró la causa de interinos en el TS: “La decisión del Supremo deja en muy mal lugar a las distintas Administraciones Públicas”