. Miles de personas se acercaron a la localidad de Valdizarbe para celebrar la Korrika. Aunque la carrera dio sus primeros pasos a las 17.00, los primeros visitantes llegaron a la zona desde la primera hora de la mañana. La música tampoco faltó y ya, desde las 8.30 arrancaban las dianas con los gaiteros de la localidad. Y el tiempo, que era una de las mayores preocupaciones de la organización, finalmente se ha portado y el sol ha sido otro de los protagonistas del día.

Hacia las 9 se abrió un espacio en el colegio público en donde los más pequeños realizaron diferentes actividades relacionados con la Korrika y a las 12 del mediodía, la plaza Julian Mena acogió una “explosión de folklore” que contó con la actuación de los laiariak, joaldunak y también hubo oportunidad de bailar unas euskal dantzak. A las 14.00 llegó el momento de sentarse en la mesa a comer,y los más de 250 comensales que se acercaron al frontón municipal, pudieron degustar unos espárragos en vinagreta, una ensalada templada, un guisado de ternera y un flan casero. Además, hubo una propuesta vegana con un segundo plato de arroz integral con pochas y una tarta de manzana de postre.

A las 16.20 para calentar motores y amenizar el ambiente, se realizó un teatro popular que relataba la historia de la localidad en relación con el euskera. En ella se contaba que a mediados del siglo XIX los vecinos del valle de Valdizarbe eran vascoparlantes y se hizo un breve recorrido en la evolución de uso del idioma y su recuperación en los últimos años. A continuación, la presentadora Anabel Arraiza subió al escenario ante un millar de personas nerviosas y emocionadas por la fiesta que estaba apunto de arrancar. El evento también contó con la actuación del grupo Demode Quartet, que hizo bailar al público con una versión a capella de la canción Euskaraz Bizi Nahi Dut del grupo hernaniarra Esne Beltza, entre otros.

El discurso de Xabier Gartzia, coordinador de la AEK en Navarra, sirvió para hacer sentir a la plaza la emoción previa al momento especial de introducir el mensaje secreto dentro del testigo. Este trabajo corrió a cargo del encargado de la Korrika Asier Amondo, que después de introducir el mensaje y cerrar bien el testigo para evitar sustos, pronunció el ya conocido “Aurrera Korrika!”, que generó una explosión de emociones y aplausos en la plaza abarrotada de petos de la 21 edición de la Korrika.

A continuación, legó el momento de los protagonistas, que subieron al escenario junto con Ane Azkona, la coordinadora del euskaltegi de la AEK. Los 16 representantes de los 16 pueblos del valle de Valdizarbe y Mañeruibarra estaban a punto de emprender el primer kilometro, unos primeros pasos cargados de emociones, meses de trabajos, reuniones y mucha ilusión.

empieza el recorrido A las cinco de la tarde en punto, los 16 representantes de la zona abandonaron el escenario recorriendo los primeros kilómetros de la carrera. La comitiva que salió por un pasillo entre el público, la lideraban los portadores del testigo Marian Otsoa y Asier Otxoa, que se mostraron muy emocionados por tener “el honor de ser los primeros”. Detrás de ellos fueron Ane Azkona, la coordinadora del euskaltegi Errobi de la localidad, y los coordinadores de la AEK y de la Korrika de todo Euskal Herria. Después les siguió toda la plaza, llevando el ambiente festivo a todas las calles de Gares. Entre los participantes se escucharon los ya habituales lemas “tipi-tapa, tipi-tapa Korrika” o “Hemen gaude euskararen alde”. La Korrika abandonó Gares para dirigirse a Mañeru y seguir así recorriendo los más de 2.500 kilómetros de su ruta de onces días sin descanso hasta acanzar la meta de Vitoria-Gasteiz el 12 de abril a las 12.30.