- Representantes de los colectivos de mayores Amona, Oneka, Pentsionistak Martxan y Sasoia protagonizaron ayer una concentración ante el Palacio de Navarra para manifestar su “malestar” por la falta de información ante la pandemia que, en su opinión, se ha dado sobre la situación de las residencias y reivindicar “una nueva orientación” que priorice la gestión pública de los servicios de mayores. Participaron once personas, separadas entre sí y vigiladas por la Policía Foral, que representaban los cuatro colectivos, tras la pancarta “Pensión mínima 1080. Revisión IPC real. Gutxieneko pentsioa”, a la que rodeaban carteles sostenidos por los asistentes con la frase en euskera y castellano “Servicios sociales públicos y universales. La salud no es un negocio”. Además los lemas como “Gobierne quien gobierne las pensiones se defienden”, “No es crisis, es capitalismo” o “Aquí cotizamos, aquí gestionamos”, Ana Sarobe en euskera y Xabier Lareki en castellano, leyeron un comunicado en el que muestran su “malestar” porque, pese a haber solicitado al Gobierno foral que informara “con detalle” de la situación vivida en las residencias por la covid-19, “solo conocemos los fríos datos” publicados en prensa. “No existe un análisis de lo que está sucediendo en el interior” de las residencias, cuántos casos se han dado en centros públicos y privados, o ratios de personal. Además, mostraron su interés por conocer la “perspectiva que se plantea” el Gobierno foral para estos servicios y la posibilidad de ampliar lo público en detrimento de los privados, basados “exclusivamente en la rentabilidad de su negocio”. Abogan porque la “nueva realidad” de “una nueva orientación de la inversión pública” que focalice su actividad en atender a las personas, dedicando los principales recursos y aumentando con mayor presión fiscal a quien tenga más recursos.