- El consejero de Ordenación del Territorio, Vivienda, Paisaje y Proyectos Estratégicos, José María Aierdi, reconoció en el pleno del Parlamento de ayer que “se han dado pasos en materia de vivienda, pero aún son insuficientes”. Además, indicó que el departamento ha experimentado un crecimiento de un 27% en el Presupuesto, y destacó que los fondos europeos se plantean como “una gran oportunidad”.
El consejero señaló que el plan de legislatura marca como objetivo la puesta a disposición de 1.000 viviendas de alquiler social, consiguiendo así “que en dos legislaturas se duplique el parque propio de vivienda en alquiler”. Por último, indicó que la política de vivienda vacía ha llegado a 776 viviendas, ha permitido aumentar un 63% el número de viviendas en 5 años, y se están otorgando a ritmo de 80 viviendas al año a través de este sistema, y que se encuentran “distribuidas en diferentes barrios”.
Aierdi añadió que el censo de vivienda vacía permitirá avanzar “de manera decidida” en políticas de vivienda, y apostó por promover la vivienda protegida, así como en el trabajo en el Decreto de habitabilidad, sobre el que dijo que “ya se trabaja de manera consensuada con los distintos agentes”.
Por su parte, Mikel Buil de Podemos-Ahal Dugu reconoció que “se vive un momento relativamente dulce” por la prorrogación de los contratos de alquiler y la prohibición de los desahucios establecido por el estado de alarma, que da una “falsa sensación de placebo”, aunque alertó de que “la vivienda es un problema estructural que tarde o temprano va a aparecer”. Desde Navarra Suma, Juan Luis Sánchez de Muniáin criticó que con el Gobierno foral actual “ya no se hace vivienda” y que “antes se promocionaba el suelo público para construir vivienda protegida y ahora no”. Apuntó que en 2019 “ha crecido el número de demandantes de vivienda protegida hasta 18.500”, la cifra “más alta en los últimos diez años”.
Por parte del PSN, Arantza Biurrun apuntó que cuando se habla de vivienda digna y asequible “se habla de derechos humanos y del cumplimiento de la Agenda 2030”.
Indicó que de esta crisis se puede “salir juntos, priorizando políticas que no dejen a nadie atrás o aumentando la precariedad” social “que habrá que ir fortaleciendo”. Por último, llamó a adaptar la política a las nuevas realidades sociales. Desde Geroa Bai, Ana Ansa señaló que “se está pendiente de un logro en el campo de la vivienda” que es “más lento” de realizar, aunque destacó los “muchos pasos dados en legislación”.
Por parte de EH Bildu, Maiorga Ramírez recordó que “es evidente que el derecho a la vivienda se encuentra vulnerado para muchos navarros, ya que hay 18.000 personas que reivindican el alquiler protegido”. Por último, desde I-E, Marisa de Simón apuntó que se debe ser “consciente de los efectos de la burbuja inmobiliaria y los tiempos pasados de especulación inmobiliaria”, cuyos efectos “están ya aquí”.
