- El nuevo escenario que se plantea tras el estado de alarma en Navarra, donde la comunidad ya no permanecerá cerrada perimetralmente y por lo tanto se podrá entrar y salir con libertad de la Comunidad Foral, no supone de todas formas que la hoja de ruta planteada por el departamento de Salud cambie de rumbo. Así, el Gobierno foral seguirá teniendo la potestad y la competencia, y así lo seguirá haciendo, de decretar el cierre perimetral de localidades en caso de que la incidencia de contagios sea elevada. El semáforo de riesgo que fija el Ejecutivo navarro, según las pautas sanitarias, y que está basado fundamentalmente en la incidencia de casos a 14 y 7 días, el nivel de contagiosidad entre la población de más de 65 años, la trazabilidad de las infecciones en el municipio seguirán siendo las claves para decidir sobre los futuros cierres perimetrales de las localidades. Ayer, la consejera de Salud, Santos Induráin, precisó que “la movilidad y la interacción social, en el ámbito publico y en el privado, son los escenarios en los que configurar desde las competencias navarras un marco normativo suficiente que combine flexibilidad con restricciones acordes” a la situación sanitaria una vez termine el estado de alarma.

El portavoz Remírez expuso que “la fórmula navarra”, en cuanto a las medidas restrictivas, “funciona”; “no somos infalibles y esta cuarta ola está costando más reducir por la fatiga pandémica y la cepa británica pero las medidas navarras funcionan tanto a nivel sanitario como a nivel de actividad económica y de recuperación del empleo”. Según dijo, “a todos nos interesa recuperar el mayor grado de actividad social y económica y sin duda hay muchas cuestiones y ámbitos con los que trabajar, todo vinculado a la situación epidemiológica”. “Somos optimistas junto al avance del proceso de vacunación para que Navarra recupere la actividad cuanto antes y sea la que antes que recupere la situación previa al Covid”, expuso.

Remírez comentó además, en torno a los cierres o no autonómicos, que se mantiene contacto con las CCAA, sobre todo con las limítrofes, un contacto “permanente” durante toda la situación de pandemia. “Vinculamos nuestra situación epidemiológica y cierta coordinación con las CCAA limítrofes como Aragón, Rioja y Euskadi”, detalló Remírez.