El abandono escolar en Navarra cae al 9,1% durante la pandemia

El abandono escolar temprano -porcentaje de jóvenes de 18 a 24 años que deja los estudios sin haber conseguido un título de Bachillerato o Formación Profesional de grado medio- cayó el pasado año en Navarra hasta el 9,1%, la mejor cifra desde que hay registros de este indicador educativo. Se trata, según los datos difundidos por el Ministerio de Educación, de uno de los porcentajes más bajos del Estado por detrás de la CAV, Cantabria y Galicia y, por primera vez, se sitúa por debajo de la media europea (9,7%). Asimismo, Navarra es la segunda autonomía con más población de entre 25 y 34 años con estudios superiores (universidad o FP superior): un 56,1% frente al 47,4% de media estatal.

La pandemia ha acelerado un proceso de mejora que comenzó hace una década. Y es que en 2010, un 17% de los jóvenes de 18 a 24 años de la Comunidad Foral había abandonado los estudios muchos con el título de ESO y otros ni tan siquiera con ese mínimo. En estos años, el abandono escolar temprano ha ido reduciéndose de forma progresiva. Los expertos alegan razones diversas para entender este logro. Por un lado, la crisis económica redujo el número de trabajos poco cualificados lo que, en la práctica, supone que los jóvenes tengan menos incentivos para dejar de estudiar. Ahora bien, la reducción del abandono también se debe al impulso que se le ha dado a la Formación Profesional y otras medidas de flexibilización del sistema educativo, que favorecen que muchos estudiantes sigan estudiando Bachillerato.

EVOLUCIÓN A LA BAJA La progresiva caída del abandono educativo en Navarra en las dos últimas décadas es evidente. En 2002, uno de cada cinco jóvenes de entre 18 y 24 años no había completado el nivel de Enseñanza Secundaria 2ª etapa (Bachillerato o FP de grado medio) ni seguía ningún tipo de formación, mientras que en 2010 el porcentaje bajó al 16,8%.

En estos últimos años, el abandono escolar ha oscilado entre el 11% y el 13%, con la salvedad del 14% que se registró en 2019. A partir de entonces y coincidiendo con la pandemia, este indicador se ha desplomado al 10,8%, en 2020, y al 9,1% del pasado 2021. Unos porcentajes que no sorprenden porque la tendencia era a la baja pero que podrían ser un espejismo dado que en estos años las administraciones educativas han sido más laxas a la hora de evaluar dadas las circunstancias adversas en las que han tenido que estudiar en este tiempo.

En el conjunto del Estado, el desplome del abandono escolar ha sido aún más impactante. Hace dos décadas, uno de cada tres jóvenes dejó los estudios mientras que en 2010 lo hizo un 26,3% y el pasado año esa cifra se redujo a la mitad con un 13,3%.