Los responsables del programa Suspertu de Proyecto Hombre han señalado que hasta el momento no han advertido un aumento de conductas de riesgo tras la flexibilización de las medidas que se adoptaron para controlar la pandemia de la covid-19, si bien se han mostrado expectantes a ver qué ocurre a partir de ahora, que se prevé un aumento de las fiestas de los pueblos y de las relaciones sociales.

Al respecto, el trabajador social Daniel Zunzarren ha explicado que si bien "teníamos una especie de miedo -también las familias- de que supusiera un boom y que los adolescentes empezaran a tener comportamientos de riesgo y salieran, nos hemos encontrado en la mayoría de las ocasiones que la pandemia ha hecho que en muchos momentos la convivencia familiar ha mejorado".

En esta línea, la psicóloga de adolescentes Saioa Iturriagagoitia ha indicado que "no nos hemos encontrado con esa explosión de consumos que se esperaba". No obstante, constató que "se ha retrasado mucho la edad de inicio. No es lo mismo empezar a consumir con 13 ó 14 años, que hacerlo con 15-16".

De hecho, ha apuntado que "cuando vamos a institutos a dar charlas o talleres nos encontramos que quizás antes en segundo o tercero de la ESO había más consumos de los que hay ahora", lo que ha achacado a "esa protección que ha dado la pandemia también".