Hacer el Camino de Santiago en sentido contrario, caminando con chancletas por la nieve o tomando rutas prohibidas durante el invierno son solo algunos de los casos protagonizados por peregrinos que emprenden la ruta sin ninguna preparación ni equipamiento y que deben ser auxiliados por las fuerzas de seguridad. Este 2022 va a ser un año de cierta "normalidad" tras la pandemia y, al igual que 2021, es un Año Santo Xacobeo. Muchas personas de todo el mundo estaban esperando este momento para hacer el Camino y esta masificación es motivo de preocupación para las fuerzas de seguridad.

En chanclas por la nieve

Sirvan solo algunos ejemplos de las incidencias atendidas en los últimos meses, entre ellas la de un peregrino que, el pasado mes de abril, quería retornar a China en caballo desde Santiago y que tuvo que ser asistido por los bomberos a su paso por Navarra al sufrir una caída. El animal se dio a la fuga y fue encontrado por un policía nacional en las inmediaciones de una zona de yeguas con la montura vuelta del revés.

En diciembre, los bomberos rescataron a un peregrino que se había resguardado en un refugio con problemas físicos tras haber emprendido por una ruta prohibida. Y en mayo la Policía Nacional auxilió en dos ocasiones a un peregrino estadounidense, la segunda de ellas cuando caminaba desorientado en dirección contraria, hacia Francia y no hacia Santiago. También en abril, una peregrina de California fue rescatada en el puerto de Ibañeta con síntomas de hipotermia, algo bastante comprensible teniendo en cuenta que iba calzada con chancletas en un lugar nevado.

Una afluencia "tremenda"

La Guardia Civil se teme que este año puede haber una afluencia masiva de peregrinos y que se multipliquen este tipo de incidentes, comenta el cabo primero Manuel Gutiérrez y el teniente Pablo Lemes, ambos con una dilatada experiencia en este tipo de sucesos.

Según relatan, en el tramo Saint Jean Pied Port-Roncesvalles hay muchos peregrinos, sobre todo asiáticos, que no saben a lo que se enfrentan en la época del invierno o comienzo de la primavera. La patrulla de la Guardia Civil de Burguete, recuerdan, encontró hace poco a una peregrina asiática que calzaba zapatillas de deporte y que sufría principio de hipotermia. Cuando los agentes le recomendaron que usara guantes, la peregrina respondió que llevaba unos en la mochila... pero resultaron ser de látex.

Muchos peregrinos, afirma Gutiérrez, ni siquiera consultaron información antes de salir, y durante el Camino lo tienen difícil, porque algunos no llevan ni el móvil. Y tampoco conocen las propias limitaciones al emprender la ruta. De hecho, en un 80% o 90% de los auxilios por motivos de salud, los peregrinos son traslados a centros sanitarios por esguinces, taquicardias o deshidratación, que podrían ser evitables con una buena preparación. También es fundamental estar al tanto del clima que va a hacer en el tramo del camino y ser consciente de los cambios bruscos que pueden darse en el tiempo.

También la Policía Nacional tiene un duro trabajo auxiliando a peregrinos, como subraya el jefe de la UED de Valcarlos, José Amable Sánchez Lumbreras, que no olvida casos como el de un matrimonio de coreanos en el que el hombre se adelantó diez kilómetros de su mujer y hubo que ir a buscarla de noche porque no llegaba al albergue. "Este año es una locura. Está viniendo gente muy mayor. La gente llega aquí y se creen que van a ir por la Castellana", destaca.

"Este año es una locura. Está viniendo gente muy mayor y se creen que van por la Castellana"

"Este año es una locura. Está viniendo gente muy mayor y se creen que van por la Castellana"José a. sánchez lumbreras - Jefe de la UED de Valcarlos