Las labores de extinción de los incendios declarados en la sierra de Leyre y en la zona de Tafalla y Larraga continúan mientras los expertos estiman que la próximas 48 horas son "críticas", ya que sigue la alerta en Navarra por altas temperaturas, a lo que se suma la sequedad del ambiente, la vegetación y el viento.

Esto hace que "todavía estemos alerta y se esté trabajando con tanta intensidad como se hizo ayer", ha declarado antes del inicio del pleno del Parlamento el vicepresidente Javier Remírez, quien ayer mantuvo un encuentro en el puesto de mando avanzado con el director del Servicio de Bomberos, Pedro Zaro, y los responsables del operativo para conocer la evolución del incendio de Leyre y las tareas que se llevan a cabo para su control.

Esta mañana, según ha indicado, el incendio que se había declarado en Olleta se puede "dar por controlado" y ahora mismo los esfuerzos se centran especialmente en la sierra de Leyre y en la zona de Tafalla y Larraga.

La bajada de las temperaturas y la intervención de las más de 45 personas que han participado durante toda la noche en las labores de extinción han conseguido evitar que siga avanzando el frente en Leyre, aunque se mantienen las llamas en una zona pendiente e inaccesible por tierra, por lo que serán los medios aéreos los que intentarán sofocarlas.

Los bomberos del Gobierno de Navarra, junto a la Unidad Militar de Emergencias y los efectivos aportados tanto por el Ministerio para la Transición Ecológica (Miteco) como por el Gobierno de Aragón vigilan el perímetro del área incendiada para atajar los rebrotes que pudieran producirse y continúan realizando labores de remate y extinción.

El vicepresidente navarro ha reconocido la labor de todos los servicios de emergencia que están trabajando en la extinción del fuego con un "agradecimiento especial al Gobierno de Aragón por su implicación".

"No podemos decir que el incendio de Tafalla-Larraga y el de Leyre estén controlados, pero no han ido a más", ha sostenido, tras lo que ha señalado que los expertos apuntan que las próximas 48 horas son "críticas".

Respecto a los daños causados por el fuego, ha indicado que ahora mismo no tienen una estimación, habrá que esperar unas 24 o 48 horas para que esté el fuego controlado y así poder hacer una estimación a través de Desarrollo Rural y Medio Ambiente y el servicio de Bomberos.

Remírez ha destacado que "afortunadamente no ha amenazado a ningún núcleo habitado", aunque ayer se produjo el desalojo de la comunidad del monasterio de Leyre. "Nunca estuvo en peligro el monasterio, pero hay que trabajar de manera preventiva" y la recomendación en ese momento, en el que el humo se dirigía hacia allí, era que se desalojara, ha dicho.

Los monjes, cuya disponibilidad ha agradecido, se trasladaron a Javier, donde se considera que permanecerán al menos durante este jueves.

"El fuego se ha centrado sobre todo en ámbito de monte, pero todavía queda por ver la superficie afectada y qué tipo de superficie", ha concluido.