Previsión meteorológica de San Fermín 2022: el tiempo en Pamplona durante los Sanfermines
La Aemet anuncia nubosidad en el comienzo de semana, que se irá disipando hacia el fin de semana sanferminero
El anhelado Chupinazo de los Sanfermines llegará en un día en el que de momento es posible que esté cargado de tormentas. La previsión meteorológica que realiza la Agencia estatal de meteorología (Aemet) contempla que el próximo miércoles día 6 será una jornada inestable, con nubosidad, probables chubascos en Pamplona y una temperatura suave para esta época del año, en torno a máximas de 22ºC.
La Aemet anuncia nubosidad en Navarra para el comienzo de semana, de lunes a miércoles, una situación que irá virando hacia más calor conforme avancen los días. De hecho, de momento los pronósticos tanto para el día 7 de julio como para el fin de semana de Sanfermines anuncian calor y más estabilidad.
Pero el día 6 puede verse empañado en la capital navarra por cielos nubosos con probables chubascos de carácter tormentoso durante toda la jornada. Informa asimismo de que las temperaturas experimentarán un descenso ligero y que el viento que predominará será cierzo.
Los pronósticos apuntan a esta inestabilidad, pero será ya conforme se acerque la jornada cuando se pueda predecir con mayor exactitud si finalmente llegarán esas probables tormentas a Pamplona y si irrumpirán durante la mañana o a lo largo de la tarde.
LA PRÓXIMA SEMANA
Las previsiones indican que a partir del domingo 10 las temperaturas rebasarán la barrera de los 30 grados, con los cielos más despejados que durante esta semana. Se esperan mínimas en torno a los 17 grados durante la noche.
Temas
Más en Sociedad
-
Profesionales de Urgencias en Navarra advierten de la saturación del servicio: "Hemos atendido 238 pacientes en 7 horas"
-
El cine declara la guerra a la inteligencia artificial: llega la primera gran demanda
-
Educación destina 1,4 millones a subvenciones a centros privados de FP para acciones de acreditación de la competencia profesional
-
El detenido de A Coruña estaba pendiente de una orden de alejamiento sobre la víctima