La activista Olivia Mandle, una joven de 16 años considerada la "Greta Thunberg española", acudirá mañana al Congreso de los Diputados para entregar las más de 150.000 firmas que ha recogido para pedir que se prohíba el cautiverio de delfines en el Estado.

Según ha informado este miércoles la organización "World Animal Protection" en un comunicado, Olivia Mandle inició hace dos años su campaña "No es país para delfines" tras constatar que el Estado es el país europeo con más cetáceos en cautividad: tiene más de un centenar de delfines y orcas en cautividad y un tercio de los delfinarios del continente.

La activista barcelonesa, que lucha por los derechos de los animales y que es embajadora del "Pacto Europeo por el Clima" de la Comisión Europea, ha recibido el apoyo de miles de ciudadanos que han firmado la petición en la plataforma Change.org, así como de numerosos científicos de todo el mundo e influyentes.

Excluidos en la Ley de Bienestar

"La reciente Ley de Bienestar Animal aprobada por el Congreso en marzo del 2023 ha dejado los delfines de lado. Por eso, mañana iremos al Congreso a solicitar a los diputados que modifiquen y prohíban la captura y cría de cetáceos en cautividad. Queremos que la generación actual sea la última generación de cetáceos que viva en confinamiento en España", ha explicado Mandle.

"Lamentablemente, España es la campeona europea en crueldad hacia los delfines. Con más de 100 cetáceos en cautividad, España es el país con más ejemplares en cautividad de Europa y uno de los primeros países en cautividad de delfines a escala mundial, sólo por detrás de países como China, Estados Unidos y Rusia", ha dicho la responsable de campañas de 'World Animal Protection' en el Estado, Sandra Campinas.

"En España también tenemos un tercio de los delfinarios del continente europeo. Queremos detener el sufrimiento de estas criaturas de gran inteligencia, que deberían estar disfrutando de su hábitat natural. Los delfines son animales muy inteligentes y sociables que sufren enormemente en cautiverio", ha añadido Campinas.

"Actualmente hay 100 delfines en cautividad en España, cada uno de los cuales pasa hasta cincuenta años sufriendo con fines de entretenimiento humano -ha remarcado Campinas- en un tanque que es, de promedio, 200.000 veces menor que el área de distribución natural de un delfín en la naturaleza y nunca se aproximará a la riqueza de la vida en el océano. Ésta debe ser la última generación de delfines en sufrir así".

Sufrimiento animal

"World Animal Protection" hace décadas que hace campañas por acabar con el sufrimiento de los animales en todo el mundo y se unirá a Olivia Mandle este jueves para reclamar que España siga el ejemplo de muchos países que ya han prohibido los espectáculos con cetáceos.

Francia estableció una ley contra el maltrato animal en el 2021 y Canadá en 2019 aprobó la "Ley Liberad Willy", que garantiza que la actual generación de cetáceos será la última que viva en cautividad.

México también está dando pasos en el ámbito legislativo en la misma dirección, igual que en Bolivia, Chile, Costa Rica, Croacia, Chipre, Hungría, Nicaragua, Eslovenia o Suiza, donde está prohibida la exhibición de cetáceos en espectáculos.

En Brasil y Reino Unido, las condiciones de la legislación para mantener cetáceos en cautividad son tan exigentes que es prácticamente imposible hacerlo en la práctica.