La radiografía territorial de la pobreza y la desigualdad en Navarra deja patente una gran diferencia entre el centro y el norte de la comunidad y la Ribera y Tierra Estella. La brecha, en términos socioeconómicos, marca una clara línea entre el sur y el norte de Navarra, la comunidad del Estado con una menor tasa de pobreza pero con desigualdades evidentes en su territorio:el Valle de Aranguren presenta una tasa de riesgo de pobreza del 8,9%, mientras que en Fitero dos de cada cinco vecinos (44%) vive bajo este umbral de riesgo, según los últimos datos recogidos en el VI séptimo Informe anual sobre la pobreza y la desigualdad social en Navarra.

Las cifras son claras: los 10 municipios mejor posicionados se encuentran en la Cuenca de Pamplona (Valle de Aranguren, Galar, Cendea de Iza, Cizur, Esteribar, Cendea de Olza, Zabalza y Bidaurreta, Etxarri y Ciriza) y las 10 localidades con unas mayores tasas de riesgo de pobreza se encuentran en la Ribera (Fitero, Castejón, Cárcar, Murillo el Fruto, Sartaguda, Sesma, Corella, Cascante, Barillas y Tulebras). El vicepresidente primero delGobierno foral, Félix Taberna, ya reconoció esta situación en la presentación del informe la semana pasada y sostuvo que hay “un debe con el sur, donde se arrojan unas cifras de pobreza superiores a las del centro de Navarra. Por ello, uno de los objetivos del Gobierno es disminuir esa tasa de desigualdad en el sur de nuestra comunidad”.

Asimismo, el estudio –que ha sido realizado por la recién creada Oficina de Análisis y Prospección– analiza las tasas de pobreza por barrios de Pamplona, donde a lo largo de los cinco últimos años disponibles (2017-2021) se repite el mismo patrón: Buztintxuri, Casco Viejo, Etxabakoitz, Milagrosa, Rochapea y San Jorge presentan tasas más altas de pobreza que la media de Pamplona. Por el contrario, las tasas de pobreza más bajas corresponden al II Ensanche, Iturrama y Ermitagaña.

El perfil

El informe utiliza diferentes indicadores, pero para medir la situación por territorios se basa en la tasa de riesgo de pobreza y de pobreza severa, que para el conjunto de Navarra se sitúan en el 21,7% y 11,7%, respectivamente. Traducido a personas, si el umbral de pobreza establecido para 2021 fue de 12.059 euros y el 21,7% de la población navarra estaba bajo esa cifra, esto significa que ese año 143.553 personas vivieron con menos de 1.005 euros al mes. Ese mismo indicador lo utiliza para analizar qué estratos de la población tienen un contexto más vulnerable. El perfil es claro: mujer joven, extranjera y que vive en la Ribera.

Atendiendo al sexo, las mujeres son quienes presentan unas tasas de pobreza más altas: un 23% frente al 20,4% de los hombres, lo que deja claro que también la pobreza y la exclusión social tienen una dimensión de género. “La pobreza femenina es un fenómeno que tiene muchos factores y en el que también vamos a incidir desde el Gobierno de Navarra”, aseguró Taberna. Pero también por edad se ven brechas evidentes. Los menores de 16 años son quienes ostentan las mayores tasas: uno de cada tres (30,6%) vive bajo riesgo de pobreza. Conforme aumenta la edad, la tasa va disminuyendo hasta llegar al grupo de mayores de 65 años, que se sitúa en el 15,5%. En todos los tramos, la pobreza es mayor entre las mujeres que entre los varones.

Pero la mayor desigualdad en la sociedad se da en función de la procedencia.Las tasas de riesgo de pobreza son mucho más bajas entre los navarros de nacionalidad española que entre los de nacionalidad extranjera. Así, mientras que el 16,4% de quienes tienen nacionalidad española viven bajo el umbral de pobreza, entre la población extranjera el porcentaje se eleva al 60,6%, es decir, tres de cada cinco extranjeros viven en situación de pobreza.