La pendencia en los órganos judiciales, es decir, los asuntos que quedan pendientes sin que tengan una resolución, han crecido de manera importante en Navarra según los últimos datos conocidos. Si algo destaca sobremanera son las demandas propias de la jurisdicción civil, es decir todo lo que tenga que ver con reclamaciones de deudas económicas, tarjetas revolving, materia hipotecaria, deudas de comunidades de vecinos, contenciosos por divorcios y, al fin y al cabo, lo que moviliza en el día a día la ciudadanía para acudir hasta el juzgado porque es lo que tiene que ver con el pan de cada mañana.

A la estadística le ha afectado en buena parte las huelgas de letrados de la Administración de Justicia y de funcionarios de este ámbito, pero a su vez, pese a que la tasa de resolución de los jueces se ha mantenido en buenos números en Navarra, el ingreso de procedimientos han crecido hasta dispararse en casi todas las jurisdicciones. Así, en lo civil, en lo que concierne a reclamaciones económicas, entre enero y septiembre del presente año se han ingresado 20.752 asuntos, un 8,8% más que en el mismo periodo del año anterior. En total, se recibieron casi 1.700 procedimientos más. Y ello ¿qué ha provocado? La situación al cierre del tercer trimestre es que la jurisdicción civil acumula ahora mismo 42.043 asuntos sin resolver, pendientes de sentencia, lo que supone un 30% más que a finales de septiembre de 2022, cuando había 32.206 demandas pendientes. Ahora son 9.837 más, lo que ha disparado dichas causas un 30,5% por encima.

De esta forma, la tasa de congestión ha pasado del 3,24 en septiembre del año pasado a 3,75 durante este ejercicio. Además, en dicha estadística conviene desglosar la afección que sufre la Sección Tercera de la Audiencia Provincial de Navarra, precisamente la única Sala especializada en materia civil. En dicho tribunal, donde se ven los recursos de todos esos asuntos que han sido examinados y resueltos en los juzgados de Primera Instancia de todo Navarra, el número de asuntos pendientes en septiembre era de 2.839 demandas. Sube dicha cifra un 25% respecto a los que había el año pasado, cuando se encontraban en 2.277. Pero es que el crecimiento de los asuntos que ingresó la Audiencia supuso un 126,5% más.

Respecto a los datos propios del tercer trimestre, el número de demandas ingresadas en lo civil ha alcanzado las 6.501 (5.188 en 2022), un incremento interanual del 25,3%. En esta jurisdicción se han resuelto 5.373 (4.724), que significa un aumento del 13,7 % y han quedado en trámite 14.766 (11.117), lo que supone un ascenso del 32,8 %, según los datos recogidos en el informe estadístico sobre la situación de los órganos judiciales correspondiente al tercer trimestre de 2023, dado a conocer por el Consejo General del Poder Judicial.

En penal se han incoado 10.850 nuevos casos en el tercer trimestre, lo que supone un leve descenso del 0,2 % respecto al mismo periodo del año anterior, cuando se recibieron 10.873. Se han resuelto 9.952 (9.888 el año anterior), un aumento del 0,6%, y han quedado pendientes 10.799 (8.005 en 2022), esto es, un ascenso del 34,9 %.

En lo contencioso-administrativo se han registrado 292 nuevos pleitos (436 en el periodo análogo del año anterior), esto es, un descenso del 33%; se han resuelto 274 (327 entre julio y septiembre de 2022), que representa un descenso del 16,2%; y han quedado en trámite 967 (930), un 3,9% más.

Navarra, por debajo de la media en litigiosidad

La tasa de litigiosidad en Navarra es de 27,8 asuntos por cada 1.000 habitantes, lo que le sitúa por debajo del conjunto de España (34,5 asuntos). Las comunidades que han mostrado una tasa de litigiosidad superior a la nacional han sido Canarias (44,5), Baleares (37,7), Andalucía (36,8), Cataluña (36,6), Madrid (36), Asturias (34,9) y Murcia (34,7). Los territorios con la tasa más baja fueron la CAV (23,2),La Rioja (26,3) y Extremadura (27,2).