El Guarderío de Medio Ambiente del Gobierno de Navarra ha logrado captar en los últimos días imágenes a través de las cámaras de fototrampeo de las que dispone en distintos lugares del valle de Roncal del oso que fue avistado la semana pasada en el término municipal de Garde por varios vecinos, entre ellos un cazador y tres personas que se lo cruzaron en una pista que conduce a la ermita de Zuberoa y en la propia carretera.
Los especialistas de Medio Ambiente llevan toda la semana trabajando en la zona para recoger pruebas e indicios encaminados a esclarecer la identidad del ejemplar y conocer su territorio dominante, después de que protagonizara un suceso inusual en Garde. La preocupación y la incertidumbre entre los ganaderos, las entidades locales y la junta del valle de Roncal es creciente debido a la cercanía que tuvo el animal con la población, debido a que descendió a una zona poco habitual y más próxima al pueblo. Además, los ganaderos entienden que se deben instaurar pronto más medidas de protección como gps para los animales, vallados electrificados y ayudas para contratar a pastores con cierta experiencia y simplificar los trámites para ello.
Un ejemplar joven de solo tres años
Las imágenes de las que disponen en el Guarderío confirman que el animal en cuestión es un ejemplar joven y se piensa que se trata de Beroi, de tres años, uno de los tres oseznos que tuvo Sorita, una de las osas eslovenas reintroducidas en Francia en 2020. 'Beroi' ya fue captado el año pasado por las cámaras disponibles en el lugar y se piensa que el oso ha penetrado en varias ocasiones en territorio navarro aunque no consta que se haya asentado en el lugar.
Después de estas últimas incursiones, cuando fue visto en Garde, y a su vez, en dos ataques consecutivos que posiblemente efectuó el mismo oso contra ovejas en el término de Ansó (Huesca), también la semana pasada, el personal del Guarderío también ha recogido muestras de pelo que enviarán a laboratorios correspondientes para certificar a través de pruebas genéticas su identidad.
Beroi también pudo ser el autor de tres ataques a ganado bovino en un paraje de Isaba a finales de mayo con el resultado de cinco ovejas muertas. El año pasado el mismo ganadero que sufrió dicho ataque también había perdido un animal en otra embestida del oso, en el único ataque que entonces se identificó en la Comunidad Foral en todo el año.
