Iñaki Perurena: la piedra, compañera de viajeJavier Bergasa
Iñaki Perurena sigue transmitiendo una desbordante y grata ilusión. La publicación de un libro sobre su vida, Harria bidelagun, editado por Pamiela y escrito por el periodista Fermin Erbiti es motivo perfecto para un encuentro con ambos en las instalaciones de Larraina. Perurena y Erbiti sienten sus respectivas vocaciones. El primero ligado sobre todo a la piedra y el segundo al papel. A los dos les une además el amor por el euskera. De hecho, Erbiti tomó posesión este viernes como ‘miembro correspondiente’ de Euskaltzaindia (en euskera urgazle). Perurena y Erbiti han sintonizado en estos meses como dos buenos tipos que transmiten sensibilidad e inteligencia. El libro, que tendrá traducción al castellano en unos meses, ahonda mediante entrevistas al leitzarra y a su entorno en el periplo vital de Perurena, su carrera deportiva, su faceta de actor o de referente de la cultura vasca. Un retrato de 160 páginas, donde el autor ha “disfrutado mucho” y ha buscado “un euskera bonito y un ritmo ágil”. La publicación se presentará en Pamplona el 11 de diciembre a las 19.30 horas en la Escuela de Idiomas.
EL NIÑO Y EL JOVEN
–Fermin Erbiti: Iñaki nace en una Leitza de 1956 todavía no industrializada, dedicada a la agricultura y ganadería. Aquel niño, Inaxio, en la escuela era Ignacio, y eso que en Leitza, al contrario que otros pueblos grandes de Navarra, el castellano no entró con mucha fuerza. Yo primero indagué en su niñez, en su relación con su abuelo, con sus padres y el trabajo, porque lo que pasa en la infancia tiene luego bastante trascendencia.
–Iñaki Perurena: Fermin ha dibujado muy bien esa etapa y esa necesidad de trabajo que de algún modo explica mi trayectoria como hilo conductor mío y el de tanta gente. La riqueza que me ha dado la piedra es que es compañera de viaje para toda la vida, en distintas etapas, de una manera o de otra. De joven, con 17 o 18 años iba a la juerga pero igual al volver a casa cogía la piedra y le daba una alzada antes de ir a la cama. Era mi verdadera amiga. Luego empecé a hacer récords, y se me conoció. A la familia y los trabajos tuve que hacerles un hueco para la piedra, y en una última etapa me he volcado de forma distinta en esa piedra, en Peru Harri (su museo al aire libre en Leitza), que cada día me está dando vida.
–Fermin Erbiti: De chaval tuviste que venir a Pamplona a examinarte por libre. Un día saliste del Ximénez de Rada y entraste en una librería...
–Iñaki Perurena: Fue mi primera inversión. Compré Manual de cultura física, de Editorial Bruguera, de Enrique Revilla, valía 40 pesetas, y lo tengo en casa. Fue el inicio de un camino de intentar absorber otras cosas y aplicarlas a la piedra. Como un cocinero que prueba con condimentos distintos. Hubo condicionantes que influyeron. Mi tío, Gartziarena, un aizkolari campeón, tuvo malas experiencias en las apuestas, porque para algunos eran un negocio. Mi padre me decía que no entrase en ese mundo, y yo intenté levantar la piedra debidamente y asimilar otras formas de entrenar. En una demostración de halterofilia de Anaitasuna en Leitza levanté la barra. Me invitaron a entrenar con ellos en Pamplona y fui, porque quería ver cómo lo hacían para aplicarlo a la piedra. Y me vino muy bien.
–Fermin Erbiti: Fuiste autodidacta partiendo de cero... Te sentirías muy solo en ese mundo...
“La riqueza que me ha dado la piedra es que es compañera de viaje para toda la vida, en distintas etapas, de una manera u otra”
Iñaki Perurena
–Iñaki Perurena: Innové con la técnica cambiando los agarres, utilizando los ángulos de palanca de una manera distinta. Hasta esa época se trataba de levantar varias alzadas una piedra. Sin embargo el halterófilo hace una alzada única con el mayor peso posible. Apliqué eso y traté de levantar más kilos. ¿Mi faceta comunicativa? Al principio no sabía estar delante de una cámara. Hoy día con el móvil todos estamos habituados al mírame, mírame. A imágenes que luego se pierden. En mi niñez había fotografías a las que nadie les daba importancia y se perdieron, me da mucha pena. Yo sin embargo iba guardando fotografías. Luego salieron los Super 8. En mi primer viaje a Norteamérica estuve filmando y empalmaba esas cintitas de tres minutos. Luego llegó el VHS, luego el CD... Quería hacer un seguimiento y tener una constancia de unas etapas que iban pasando.
Perurena y Erbiti, durante la charla.
–Fermin Erbiti: Tu padre no quería que anduvieras por ahí con la piedra, pero luego te ayudó, y cuando tenías 17 años concluyó que no había nada que hacer con ese chico tozudo que había empezado como aizkolari pero que prefería la piedra.
–Iñaki Perurena: Porque veía que yo respondía en la carnicería, no abandonaba el trabajo para el deporte. Un día fui a probar una piedra a Gipuzkoa en una moto Derbi que tenía, y de vuelta compré unos pasteles. A mi padre le sorprendió que yo gastase en eso. Cuando dije que venía de levantar piedras se puso como una fiera.
–Fermin Erbiti: Era más duro que la madre.
–Iñaki Perurena: La madre era mi compinche. Uyy, las madres eran todas así. A la mía le tuvieron que cortar el pie. Un médico le metió una inyección de yodo y se le quedó toda la pierna negra. Yo tenía 18 años, le cogí en brazos para que mi padre y ella fueran al hospital. Después de cerrar la carnicería fui a verles, y el padre salió al pasillo y me dijo: Primero van a intentar salvarle la vida, luego le cortarán la pierna. Ahí estuvo duro. Mi padre le preguntaba al médico: Y si fuese tu mujer, ¿le cortarías la pierna? Al final lograron que le quedase un poquito de tobillo, y aun estando como estaba, había que hacer una exhibición en Martzilla, y me cogió el dedo gordo, y mi madre con la pierna cortada me ayudó a levantar la piedra al furgón...
EL DEPORTISTA DE LOS RÉCORDS
–Iñaki Perurena: Un hermano de Urtain me dijo que tenía una piedra con la que podría levantar trescientos kilos, una barrera inalcanzable sobre todo por el volumen de las piedras. En un principio se utilizaban calizas, luego encontramos granito, para reducir ese volumen. Y así poquito a poco cada año ibas superándote. En Las Seis Horas de Euskadi, un evento impresionante, me decían: Aquí hay que venir siempre con una piedra mayor, no nos vale que vengas con la de antes para levantarla más veces.
–Fermin Erbiti: Y en 1987 alcanzaste los 300 kilos, un hito...
–Iñaki Perurena: Y los 301 fueron en París. Eso le dio otra dimensión. ¿Consecuencia? carretera, carretera y carretera, haciendo actuaciones.
“Innové con la técnica de la piedra cambiando los agarres, utilizando los ángulos de palanca de una manera distinta”
Iñaki Perurena
–Fermin Erbiti: No tuviste mucho tiempo de saborear tus éxitos porque no parabas.
–Iñaki Perurena: No disfruté debidamente, no lo hice. Ahora que quiero disfrutar y andar un poquito más suave te vienen las cosas amontonadas, pero igual es lo bonito, porque sientes un cosquilleo con eso de que llegas o no llegas.
–Fermin Erbiti: Te va la marcha de no parar.
Ejemplar de 'Harria bidelagun'
–Iñaki Perurena: Sí, pregunté a uno más o menos de mi edad, jubilado, qué tal lo llevaba: Tú no sabes en invierno lo largas que son las tres horas desde las seis de la tarde hasta las nueve de la noche, me dijo.
–Fermin Erbiti: Ahora todos los deportes de alto nivel cuentan con nutricionista y psicólogo. Cuando te veía en Las Seis Horas en ETB, con Anoeta lleno, y tú ibas ahí... ¿Psicológicamente lo preparabas?
–Iñaki Perurena: Claro que sí, pero ya me gustaría saber cuántos psicólogos tuvo Julián Retegi. No le hacía falta, ya tenía supermotivaciones sin necesidad de ir a un psicólogo. Hoy día ¿por qué un deportista por qué tiene que recurrir a un psicólogo?
–Fermin Erbiti: Porque hay mucha tensión.
–Iñaki Perurena: Jodé, ¿y antes?
SU PROYECCIÓN MEDIÁTICA
–Iñaki Perurena: Con un micrófono tratas de conectar, de retratar tu vida y tu mundillo. Me llamaban ‘morrosko’, ‘forzudo’... Había que romper un poquito con eso también. Con Encarna Sánchez entré en directo por teléfono a la noche, y me presentó como el hombre que era capaz de levantar tantos kilos. Y le dije: Mira, Encarna, eso que has dicho es así, pero aparte de eso también hay esto, esto y esto, y me pidió perdón. Raffaella Carrá, en directo, en televisión, me pidió que levantase a Loles León con una mano. Yo le dije que era un deportista, y que como tal había ido a que se me hiciese una entrevista, no a levantar a Loles. Cogió un rebote que me ignoró. También estuve en el Un, dos, tres, y con Elena Santoja en un programa de cocina.
–Fermin Erbiti: Estuviste 20 años en Goenkale.
–Iñaki Perurena: La razón fue que posiblemente no incordiase, llevase el guion aprendido y esperaba mi turno. Yo no sabía qué era ser actor...
–Fermin Erbiti: Ibas acumulando trabajo, trabajo, trabajo...
LA CULTURA VASCA Y EL EUSKERA
–Iñaki Perurena: El lenguaje es la seña de identidad más clara, pero en muchos sitios de Navarra en los que se ha perdido la lengua, la manera de ser igual está más intacta que en cualquier lugar supervascoablante. La forma de educar, el auzolan, la transmisión de padres a hijos. Una vez preguntaron qué es ser vasco, y una de las respuestas fue pagar aquí los impuestos. Es un argumento. Esa crítica de que ahora se está imponiendo el euskera... ¿Imponer? Basta que echemos una ojeada al libro que ha salido ahora de Monteano (Del euskera al castellano) y algún otro previo también.
“El euskera tenía que ser algo que nos una a todos los navarros porque es propio y nuestro. Este libro tenía que ser en euskera”
Fermin Erbiti
–Fermin Erbiti: Donde trabajo, en la Cámara de Comptos, en 1875 se juntaron unos cuantos intelectuales de Navarra (Ansoleaga, Iturralde y Suit, Campión...). Formaron la Asociación Euskara de Navarra. Son los que ponen en marcha el lema Zazpiak Bat, tenían una idea cultural de país. Dijeron que les dolía la pérdida reciente del Reino, y constaron que el euskera en muy pocos años había desaparecido de la Zona Media de Navarra. En el siglo XX la Diputación de Navarra promocionó la creación de Euskaltzaindia, con las otras tres diputaciones vascas. ¿Cincuenta años después hubiese sido posible eso? En el siglo XIX y buena parte del XX estaba clarísimo que el euskera era consustancial a Navarra y el máximo tesoro cultural de Navarra. A mí me ha entristecido muchísimo que parte de la clase política de Navarra de manera irresponsable e impresentable, haya sido totalmente indiferente a un idioma que se había ido recortando desde hacía muchos decenios. El euskera estaba en caída libre en Navarra. En zonas euskaldunes como el pueblo de mi padre, Alkotz, de repente de una generación a otra desapareció. Entonces las diputaciones vascas, y por supuesto la de Navarra en cabeza, crearon Eusko Ikaskuntza (1918) y la mencionada Euskaltzaindia (1919). En los años cincuenta la Diputación de Navarra con Príncipe de Viana comenzó a fomentar el euskera por los pueblos, animando a los chavales que lo hablaban bien. Aquellas diputaciones tenían mucha más sensibilidad respecto al euskera –y ya es vergonzoso tenerlo que decir– que muchos políticos de después. El euskera tenía que ser algo que nos una a todos los navarros, porque es propio y nuestro, y el colmo de los colmos es que estemos pensando si somos navarros o vascos, cuando nadie se había hecho esa pregunta. Por supuesto que por navarro eres vasco. En fin, me da mucha pena, aunque en los últimos años en Navarra el euskera y la cultura vasca van hacia arriba, no precisamente por el apoyo de las instancias oficiales, para empezar por una ley impresentable, pero creo que hay empuje en la gente, en la cultura y en el idioma. Este libro tenía que ser en euskera. ¿Cómo no iba a serlo con Iñaki?
–Iñaki Perurena: Las derechas de hace unos años en Navarra eran vasquistas, y estaban a favor del euskera, y si hubiesen tenido un poquito de sentido de la inteligencia y seguido en esa línea, la derecha habría tenido más parcela en vez de estar en contra del euskera. En esa estrategia a lo mejor les habría ido mejor.
Expresivo gesto de Iñaki Perurena durante la charla.
–Fermin Erbiti: También ha habido elementos que han jugado en contra.
–Iñaki Perurena: También, también.
–Fermin Erbiti: Mezclar la violencia desde luego no ha sido para nada positivo, por supuesto éticamente, que es lo importante, pero tampoco desde el punto de vista del idioma. Ahora hay muchos grupos de música, muchísimos escritores en euskera en Navarra. Más que nunca. En Durango se van a presentar muchísimos libros. Contamos con la suerte de tener el idioma más antiguo de Europa, que es una joya. Koldo Mitxelena decía: Le damos muchas vueltas a de dónde viene el euskera, pero el mayor secreto y lo más increíble es cómo ha perdurado, cómo ha llegado hasta aquí, que lo seguimos hablando. Me ha venido algún profesor universitario de fuera, al ver que en Pamplona y en otros sitios la gente sigue hablando en euskera se ha maravillado. Que a muchos de los dirigentes políticos les dé igual y sean incapaces de aprenderse ni dos líneas o dos saludos me da mucha pena, porque es una falta de cultura y de sensibilidad.
–Iñaki Perurena: Creo que se va recuperando esa falta de cultura. Cada vez más se va a ver con más normalidad y con más lógica.
–Fermin Erbiti: En los últimos años en Pamplona se ha notado que ahora se habla muchísimo más.
SOBRE PERU HARRI
–Iñaki Perurena: Todos los días me pregunto si cuando yo ya no pueda ir allí a contarles esa historia esto igual se terminará. No puedo decirles a mis hijos que el fin de semana para su descanso estén en la puerta por si viene alguien. Pienso también en el día en que yo ya no esté... me voy haciendo viejo y Peru Harri se está haciendo viejo. Trato de hacer reformas y arreglos, y a lo mejor algún día se queda la puerta abierta y que se deshaga poquito a poco. La gente cuando llama a Peru Harri se sorprende. ¿Pero tú eres Iñaki? ¿Y va a estar tú? Y yo les digo que sí, y que cuando se vayan luego limpiaré el váter y quitaré las cagadas de los burritos, y buenamente haciendo lo que pueda. Como hizo Joxe Ulibarrena en Arteta y ahora está haciendo su hija Elur.
lÑAKI PERURENA
- Harrijasotzaile. No es fácil sintetizar la vida de Perurena (Leitza, 1956), porque además de su faceta deportiva, está la de actor, carnicero y ganadero o poeta, y la más espacial, que responde a su profundo vínculo con la piedra, Peru Harri, su museo al aire libre, que él mismo cuida y muestra en Leitza.
- Conexión para el libro. “Fermin ha ido con goxotasuna, con tranquilidad, sentándonos con un cafecito a hablar, y cuando estás en un ambiente relajado, y cómodo empiezas a hablar”.
FERMIN ERBITI
- Periodista. Nacido en Pamplona-Iruña en 1964. “Si algo tiene de bueno el periodismo, es que te permite conocer a gente interesante. Eso no tiene precio”. Sobre esa filosofía ha compuesto este libro donde entrevista a Perurena y a personas que le conocen bien.
- Escucha tranquila. Erbiti fue conversando durante horas con Perurena, en una sucesión de encuentros que empezaron hace un año. Con este libro el periodista navarro ahonda en su extensa experiencia bibliográfica.