El Sindicato de Vivienda ha convocado de urgencia una manifestación para este miércoles a las 7.30 horas de la mañana con el fin de evitar el desahucio de una vecina en la calle San Lorenzo 17, en el Casco Viejo de Pamplona. En una nota de prensa enviada, detallan que el motivo del desahucio "tiene que ver con la finalización del contrato de alquiler, promovido por un gran propietario que posee al menos siete viviendas en ese mismo edificio, además de varios pisos en otros bloques". Todo el bloque, de hecho, "es propiedad de dos hermanos y el dueño del piso se niega a negociar". Además, desvelan que "hace dejación de funciones como propietario, ya que no se hace cargo de arreglos y reformas que le competen". Ana Belén, la vecina afectada, "vive actualmente sin agua caliente". El piso detallan, "es viejo y está ubicado en una sexta planta sin ascensor".

El comunicado comienza poniendo en contexto que "Ana Belén, de 57 años, se encuentra en situación de extrema vulnerabilidad. Tiene reconocida una discapacidad del 75 % y está en tratamiento contra el cáncer. Vive en el piso desde 2016, y actualmente vive con su pareja. Hacia finales de 2021 empezó el procedimiento judicial contra ella: pese a no tener ni un solo impago, el propietario no quiere renovarle el contrato de alquiler. En cualquier caso, el procedimiento quedó paralizado cuando, en febrero de 2022, Ana Belén fue incluida en la moratoria de desahucios por motivos de salud y vulnerabilidad.

Sin embargo, este año ha sido excluida de la moratoria al considerar el juzgado que ha rechazado dos «alternativas habitacionales», lo que ha reactivado el proceso y ha derivado en la fecha actual de lanzamiento. Lo que no tiene en cuenta el juzgado es que estas supuestas alternativas eran estancias en residencias, lo cual en absoluto responde a las necesidades que tiene Ana Belén de disponer de una vivienda, ni a su derecho a permanecer en el que ha sido su hogar durante 10 años. Y, por otra parte, estas alternativas no han sido comunicadas debidamente, de forma que Ana Belén no ha tenido ni siquiera la opción de «rechazar» las alternativas.

Denunciamos que, una vez más, las instituciones abandonan a quienes supuestamente dicen proteger. En lugar de garantizar la extensión de la moratoria de desahucios que debería incluir su caso sin contrapartidas, o en lugar de ofrecer una alternativa de vivienda de calidad, responsabilizan a la inquiline de su situación y permiten que un gran propietario, que se niega a negociar, la eche a la calle".

Exigen suspender el desahuicio

Ante esto, desde el sindicato "exigimos la suspension inmediata de este desahucio. Ana Belén tiene todo el derecho a seguir viviendo en su casa; ya está bien de que los multipropietarios puedan jugar con la vida de sus inquilinas e inquilinos por el poder que les otorga la propiedad privada, y de que la moratoria de desahucios, que supuestamente debía valer para suspender temporalmente estas situaciones, deje de aplicarse por una infinidad de excusas. Otra vez, el negocio de la vivienda se impone frente a la posibilidad de un acceso universal a ella".

Por todo ello, "convocamos a una concentración este miércoles 4 de junio a las 7:30 h en la calle San Lorenzo, número 17, para frenar este desahucio. Porque hoy es Ana Belén, pero mañana puede ser cualquiera. Frente a los desahucios, la especulación y al desamparo institucional, solo la solidaridad y la organización pueden ser el medio mediante el cual avancemos hacia un horizonte que garantice una vivienda universal, gratuita y de calidad".