Irene y María Carasa Alamillo son hermanas mellizas, nacieron el 21 de diciembre de 2007, viven en Tudela y han estudiado en el Colegio San Francisco Javier (Jesuitas) de la capital ribera, desde donde se presentaron a una PAU (Prueba de Acceso a la Universidad) cuyos resultados han sido espectaculares.

Pese a las afinidades que sobre ellas se pudiera predecir, Irene y María, al menos en los estudios, "somos del todo opuestas, no tenemos nada que ver. A mí siempre me ha tirado la Ciencia y a mi hermana, la Historia", cuenta María. Al menos sí que son mellizas también en calificaciones. Irene ha obtenido un 13,318 en la prueba y estudiará Historia en la Universidad de Navarra.

Bachiller biosanitario y de humanidades

María, que estudió el Bachiller biosanitario, ha logrado un 13,339, sabe que hará Medicina y ahora tiene que decidir la universidad a la que acudirá. "Hasta hace poco no lo había pensado en serio porque no me veía capaz de entrar en Medicina, porque creía que mis notas no eran lo suficiente. Ahora, creo que con la nota que he sacado, podré entrar donde quiera aunque es posible que me tire la cercanía con mi hermana". María dice que el trabajo como veterinaria de su madre siempre le había fascinado, pero que "no podía hacer lo mismo, porque me dan mucha pena los animales, así que me decidí por la medicina humana".

Irene es el otro polo. Ya estaba admitida en Historia en la UN, dice que por ello afrontó la PAU con mucha tranquilidad y sabedora del esfuerzo realizado durante todo el curso, y que a partir de matricularse en el Bachillerato de Humanidades y de cambiar las Matemáticas por el Latín, empezó a confirmar que sus gustos por la Historia Antigua y Clásica podían formar su base para el futuro. "Todo el mundo me dice que es una carrera que no tiene salida, pero no hay nada que más me guste y que me haga más feliz y me apasione. No hay nada que me llene tanto", confiesa.

Irene espera empezar a disfrutar pronto del verano, se irán a Salou con el resto de amigas y regresará a Irlanda donde estuvo hace dos años con su familia de intercambio. Esta tarde, en la residencia, tenían una visita imprescindible a sus abuelos, que van a presumir de nietas como nadie. Todo va a ser bien merecido. "No hay otra fórmula que haber estudiado mucho durante el año y afrontar la prueba con la serenidad de lo que has estudiado".