El 16 de octubre se celebra el Día Mundial de la Alimentación y desde El Colegio Oficial de Dietistas y Nutricionistas advierten de la importancia de consumir yogur. Estamos en una época en la que la vuelta al cole, al trabajo, los horarios, el inicio del otoño, bajada de temperaturas… Son factores que nos pueden estresar y afectar a nuestro sistema inmune. Por eso, dedicar tiempo a hacer la compra en un establecimiento de confianza, con productos de calidad y cuidar de nuestra alimentación, son consejos importantes que no debemos olvidar.

Entre esos productos, hoy destacamos el yogur. Y es que el yogur, en concreto el natural, aporta proteínas, calcio, vitaminas y otros nutrientes esenciales y puede mejorar la microbiota intestinal al introducir microorganismos beneficiosos deominados probióticos, que ayudan a diversificar y reforzar las bacterias del intestino. “El yogur contiene bacterias vivas, como lactobacilli y bifidobacterias que son microorganismos beneficiosos para el intestino. Estas cepas pueden añadir nuevas bacterias a la población de la microbiota intestinal, aumentando su diversidad. Este efecto positivo contribuye a una mejor digestión, refuerza el sistema inmune y ayuda a recuperar la microbiota después de un tratamiento con antibióticos”, explica Izaskun Arrarás, del Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de Navarra.

De este modo, el yogur contribuye a reforzar la barrera intestinal, y esos probióticos presentes en el yogur ayudan a mantener una mucosa intestinal saludable y a transformar la lactosa en ácido láctico, mejorando el tránsito intestinal. “En la salud digestiva puede reducir la hinchazón y gases. En el sistema inmune, puede reforzar las defensas del organismo”, añade Arrarás.

Desde el Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de Navarra se recomienda elegir yogures naturales que especifiquen la presencia de probióticos para obtener todos sus beneficios así como un consumo regular para un efecto más significativo en la microbiota.

Yogur y salud mental

El intestino y el cerebro están en constante comunicación a través de un sistema llamado eje intestino-cerebro por lo que la alimentación influye directamente en nuestra salud mental. Las bacterias intestinales, también conocidas como microbiota, actúan como un medio de conexión en este eje, influyendo en el cerebro. El intestino produce una gran parte de neurotransmisores como la serotonina, conocida como la "hormona de la felicidad", que regula las emociones. Según destacan desde el Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de Navarra, es aquí donde podemos destacar el consumo de yogur natural, pues "beneficia la conexión intestino-cerebro al aportar probióticos que promueven un microbioma intestinal saludable, puede mejorar la función cognitiva, el estado de ánimo y la gestión del estrés, ya que influyen en la producción de los neurotrasmisores como la serototina y en la reducción de la inflamación cerebral", destaca la dietista-nutiricionista Izaskun Arrarás. "Un microbioma intestinal equilibrado puede mejorar la memoria, la atención y la concentración, ya que reduce la inflamación y potencia la absorción de nutrientes. Al promover un intestino sano, el yogur puede tener un impacto positivo en la salud mental, aliviando síntomas de ansiedad, estrés y depresión. Además de probióticos, el yogur es una buena fuente de proteínas, calcio y vitaminas B, que son esenciales para el buen funcionamiento cerebral y la transmisión de señales neuronales", enfatiza desde el Colegio Oficial de Dietistas-Nutricionistas de Navarra.

Lactuyogur: marca recomendada por el colegio de dietistas y nutricionistas de Navarra

Dado el todo lo que aporta el yogur, es muy importante hacer una buena elección para que podamos aprovechar todos esos beneficio. Por eso, lo primero que debemos hacer es fijarnos en los ingredientes que contiene: solo 2 ingredientes, leche y fermentos lácticos. Muchos de los yogures naturales llevan leche en polvo o proteína láctea, que sirven para que el yogur coja “cuerpo” y sea más espeso (además de abaratarlo ya que la leche en polvo es más económica), pero la realidad es que la leche fresca nutre muchísimo más que la leche en polvo, por ello conviene elegir los yogures que solo contengan leche fresca. En Lacturale los yogures naturales están hechos con solo 2 ingredientes: leche fresca, además Certificada en Producción Integrada de Navarra, y fermentos, nada de leche en polvo, ni colorantes, ni natas, ni azúcares añadidos. Además de salud para el cuerpo y la mente, al elegir productos locales también cuidamos la economía local y la sostenibilidad medioambiental.