El director ejecutivo de OpenAI, Sam Altman, informó a sus empleados el lunes de que la compañía declaraba un "código rojo" para mejorar la calidad de ChatGPT, según un memorando interno al que tuvo acceso The Wall Street Journal y The Information.

Esto se produce cuando aumenta la presión por parte de los competidores, como Google y Anthropic, que han reducido su ventaja en el mercado de la inteligencia artificial (IA).

De acuerdo con la prensa especializada, a Altman le preocupa especialmente Google, que el mes pasado lanzó una nueva versión de su modelo de IA Gemini que superó a OpenAI en las pruebas comparativas del sector e impulsó las acciones del gigante de las búsquedas.

Centrarse en mejorar ChatGPT

En el memorando Altman afirmó que la compañía retrasará iniciativas como anuncios, agentes de compras y salud, y un asistente personal, Pulse, para centrarse en mejorar ChatGPT.

Las mejoras de su chatbot se centran en funciones como mayor velocidad y fiabilidad, mejor personalización y la capacidad de responder a más preguntas. Se realizará una llamada diaria a los encargados de mejorar el chatbot, conforme al memorando, y Altman alentó las transferencias temporales de equipos para acelerar el desarrollo.