Un hombre ha fallecido y otros dos han resultados heridos de gravedad esta tarde tras colisionar frontalmente el vehículo en el que viajaban con un camión en la NA-160, en el término municipal de Murchante. Según fuentes de SOS Navarra y de la Policía Foral, el siniestro, en el que ha perdido la vida Miguel Ángel González Fernández, de 58 años y vecino de Corella, se ha producido a la altura del kilómetro 6,7 de la carretera NA-160 y ha consistido en una colisión frontal entre una furgoneta y un camión, que posteriormente han quedado volcados en la cuneta a causa del impacto.
El centro de gestión de emergencias de SOS Navarra ha recibido el aviso del siniestro a las 15:54 horas y ha movilizado al lugar de los hechos a efectivos de bomberos del parque de Tudela, una ambulancia de soporte vital avanzado (medicalizada), una ambulancia de soporte vital básico, un equipo médico de Cintruénigo y patrullas de Tráfico y el equipo de Atestados de la comisaría de Tudela de la Policía Foral.
El conductor del camión ha resultado ileso mientras que dos de los ocupantes de la furgoneta están heridos de gravedad. Los servicios de emergencia no han podido hacer nada para salvar la vida del vecino de Corella, que ha quedado atrapado en el vehículo y ha fallecido en el mismo lugar del accidente.
Trasladados al Reina Sofía
Las ambulancias han trasladado a los dos heridos al Hospital Reina Sofía de Tudela, uno de ellos, un varón de 47 años, presentaba un traumatismo torácico y ha tenido que ser trasladado en ambulancia de soporte vital básico. El otro, un hombre de 36 años, ha sufrido un traumatismo abdominal y ha tenido que ser evacuado en ambulancia de soporte vital avanzado. Ambos han quedado ingresados en el centro hospitalario con pronóstico grave.
El cuerpo del fallecido ha sido trasladado al Instituto Navarro de Medicina Legal, donde le será practicada la autopsia. Agentes de la Policía Foral investigan las causas y la dinámica del siniestro.
Padre de dos hijos y muy aficionado a la bicicleta
La trágica muerte de Miguel Ángel González ha provocado un enorme pesar en Corella, localidad en la que residía y donde esta tarde-noche sus vecinos le recordaban con gran cariño. El fallecido, casado y padre de dos hijos, una mujer de 25 años y un varón de 19, trabajaba en el sector de la construcción.
González era miembro de una familia muy conocida en Corella “con mucha vida en el pueblo”, según fuentes de la localidad, y muy aficionado a la bicicleta. Pertenecía al Club Ciclista Corellano cuyos integrantes se encontraban “destrozados”. “Era una persona muy querida por todos y queremos trasladar nuestro más sincero pésame a su familia. Es una gran pérdida”.
