“Estábamos en la sala del Notario a grito pelado, las chicas de la administración han debido llamar a la Policía Local. Si hubiera sido la Guardia Civil, en ese momento habrían actuado de otra manera, pero llaman la Policía Local hablan de Ramón Lázaro, y ya sabéis lo que ocurrió con uno de sus agentes, y aparecen 5 ó 6 agentes. Anda que no hay discusiones en las Notarías”. De esta forma ha descrito el presidente del Tudelano, Ramón Lázaro lo sucedido este mediodía en la Notaría de la capital ribera cuando iba a firmar la venta del club a los empresarios valencianos de Edventure deporte y animación. Según dio a conocer la Policía hubo una denuncia contra Lázaro por amenazar de muerte a los empresarios, incluso se dio a conocer que había sido con un abrecartas, “no soy un matón, eso es táctica de matones rusos”, ha afirmado para negar las acusaciones.
Acaloramiento
El presidente ha señalado que los valencianos, a la hora de firmar no iban a cumplir con lo que habían acordado ya que le iban a pagar el millón de euros por el que vende la entidad pero no iban a dejar dinero en la caja, que era otra de las condiciones, ya que le decía que “buscaremos patrocinadores”. Este hecho no le ha gustado a Lázaro que ha montado en cólera, “con el acaloramiento ha llegado la policía y nos han dicho que cada uno fuera por su lado a la Policía Foral para presentar denuncia pero ninguna de las dos partes ha querido presentar denuncia”.
De hecho, según su versión, los valencianos siguen interesados en el club y las negociaciones siguen adelante, ya que este martes se van a reunir con representantes del Banco Santander para conseguir financiación. “Se ha filtrado una noticia que no es cierta”, ha repetido una y otra vez al tiempo que enseñaba la pulsera de ingreso en el Hospital Reina Sofía donde ha acudido tras al incidente, víctima de un ataque de ansiedad, según el diagnóstico. “No ha habido armas blancas en ningún momento, si fuera así estaría ahora en el calabozo y no es así, aquí estoy a pecho descubierto dando la cara”.
En el balance de la gestión que ha realizado en rueda de prensa ha recordado que adquirió el club por un euro pero debió hacerse cargo de la deuda que ascendía a 1,4 millones de euros, “lo dejo saneado y es el momento de vender porque los dos clubes tienen mucho gasto y no puede crecer ninguno de los dos. Con los presupuestos que manejamos estamos destinados a mantenernos en la categoría y yo quiero que crezcan”, ha señalado al tiempo que ha explicado que tenía tres ofertas, siendo la de los valencianos la más solvente.
El Tudelano tiene en la actualidad 36 equipos de diversas categorías, 4 de ellos femeninos y una deuda a 0 ya que, según el presidente, “he dejado el club completamente saneado”, dejando entender que se había terminado su ciclo, “en los tres años no hemos tenido ni una denuncia por impagos”, ha sentenciado queriendo destacar su trabajo al frente de la entidad.