Operado en Pamplona un joven tras una violenta agresión en Calahorra con tres detenidos

La Guardia Civil ha detenido a tres jóvenes, de 19, 17 y 15 años y naturales de Calahorra (La Rioja), por su presunta implicación en el altercado registrado en la madrugada del pasado día 10 en una de las zonas de ocio del municipio, en el que un joven de 23 años sufrió heridas graves, con un fuerte golpe en la cabeza del que tuvo que ser intervenido en Pamplona.

Según han confirmado fuentes del caso, los jóvenes se encuentran ya en libertad a la espera de que continúen las investigaciones.

El suceso generó gran alarma social en Calahorra, alimentada por bulos en redes y declaraciones contradictorias, lo que obligó a desplegar a más de 80 agentes para prevenir disturbios. La tensión derivó en una concentración ciudadana en la que se condenó la agresión y se reclamó más seguridad en el municipio.

Los detenidos, algunos con antecedentes penales y administrativos, han sido puestos a disposición de la autoridad judicial y de la Fiscalía de Menores, ha informado este martes la Comandancia de La Rioja en una nota.

En el lugar del altercado, la Policía Local, la Guardia Civil y los servicios sanitarios localizaron a la víctima, tendida en el suelo con un fuerte golpe en la cabeza, mientras otro varón, visiblemente alterado, trataba de asistirlo.

Debido a la gravedad de sus lesiones, el herido fue trasladado de urgencia al Hospital Fundación de Calahorra, y después a la Clínica Universitaria de Navarra, donde tuvo que ser sometido a una intervención quirúrgica.

Búsqueda y detención de los agresores

Los primeros testimonios recabados en el lugar apuntaban a que la víctima podría haber sido agredida con un bate de béisbol o con un objeto similar.

Poco después, la Policía Local y la Guardia Civil tuvieron acceso a un vídeo en el que se aprecia al joven herido en el suelo, rodeado de varios individuos con actitud agresiva, grabación en la que parece observarse como uno, antes de abandonar el lugar, le propina una patada.

A raíz de estas imágenes, las patrullas desplegadas en la zona intensificaron la búsqueda de los presuntos agresores y del objeto utilizado en la agresión, aunque en ese momento no se obtuvieron resultados positivos.

A la vista de la gravedad de los hechos, la Guardia Civil desarrolló una investigación exhaustiva, que ha permitido identificar y detener a los presuntos agresores.

El incidente en Calahorra generó una notable alarma social, ya que dio lugar a la difusión de publicaciones en redes sociales y a la convocatoria de una manifestación en la ciudad.

Los indicios recabados por los agentes señalan que la conducta de los implicados no fue fruto de la casualidad, sino acciones premeditadas y reiteradas, ya que ninguno de los involucrados mostró una actitud pacífica; por el contrario, suelen mantener una predisposición al enfrentamiento y la provocación.

Además, al poseer parte de los implicados antecedentes penales y administrativos, se refuerza la hipótesis de que acuden a zonas de ocio con intención de originar altercados e incitar reacciones violentas por parte de terceros.

Los agentes advirtieron del riesgo que supone difundir rumores o información no contrastada, pues contribuye a la alarma social y puede derivar en conflictos. Recordó, además, la necesidad de recurrir únicamente a fuentes oficiales, ya que las noticias falsas dificultan la labor investigadora y agravan las consecuencias de los hechos.