La Policía Municipal de Pamplona registró durante el pasado fin de semana un total de 25 accidentes de tráfico en la ciudad, con un balance de cinco personas heridas, dos de ellas de carácter grave. Entre todos los siniestros, el más relevante fue caso de una villavesa, ocurrido en la avenida Pío XII, donde tres pasajeros de un autobús urbano resultaron lesionados tras una maniobra evasiva y un frenazo brusco del conductor.
El suceso tuvo lugar cuando el autobús realizó una frenada repentina que provocó la caída de varios usuarios en el interior del vehículo. Los tres heridos, personas de edad avanzada, sufrieron diversas lesiones, una de ellas grave con posible fractura. Todos fueron trasladados en ambulancia al Hospital Universitario de Navarra (HUN) para su atención médica.
Otro de los accidentes destacados del fin de semana fue la caída de un conductor de patinete eléctrico en la calle Mayor, a la altura de la avenida de Gipuzkoa, mientras circulaba por el carril bici. El afectado, un varón de 38 años nacido en 1987, no llevaba casco en el momento del accidente y tuvo que ser trasladado al HUN para su valoración.
En uno de los accidentes atendidos, el alcohol estuvo presente. Se trata del ocurrido en la tarde del viernes, cuando un conductor realizó una maniobra prohibida y colisionó contra otro turismo. Tras ser sometido a las pruebas de alcoholemia legalmente establecidas, arrojó un resultado positivo de 0,94 mg/l de aire espirado, por lo que fue investigado por un delito contra la seguridad vial. En este siniestro no se produjeron lesiones personales.
Seguridad vial
En el ámbito de la seguridad vial, la Policía Municipal realizó un total de 1.061 controles de alcoholemia, de los cuales seis arrojaron resultado positivo. Cuatro conductores superaron la tasa administrativa permitida, mientras que otros dos fueron investigados por un presunto delito contra la seguridad vial al registrar tasas penales.
Durante el mismo periodo, la Oficina de Denuncias y Atención al Ciudadano (ODAC) recogió 27 denuncias que derivaron en la detención de ocho personas por distintos delitos. Entre los arrestos figuran una detención por malos tratos en el ámbito familiar y otra por quebrantamiento de una medida cautelar. Además, dos personas fueron detenidas por un robo con violencia e intimidación en el Casco Antiguo. El balance se completa con una detención por desobediencia y resistencia a la autoridad, dos por atentado contra agentes y una más por lesiones y amenazas graves.
Pelea en Buztintxuri
Más allá del tráfico y las detenciones, la Policía Municipal llevó a cabo un total de 370 actuaciones relacionadas con la seguridad, la convivencia ciudadana y la atención a personas. Una de estas intervenciones se realizó en la madrugada del día 13 en el barrio de Buztintxuri, donde se procedió a la identificación de siete personas tras una discusión en la que se llegaron a lanzar objetos contundentes, como botellas, entre otros.
La primera detención se realizaba a las 8:30 horas del viernes día 12, en la zona de Ezkaba, donde se procedió a la detención de un varón de 44 años como presunto autor de un delito de resistencia, desobediencia y amenazas graves, tras amenazar a responsables de un centro escolar y a varios menores de edad. Los agentes intentaron mediar en la situación, pero la actitud agresiva y de falta de respeto del implicado hizo necesaria su detención.
En la madrugada del sábado día 13, a las 4:36 horas, en la plaza de las Merindades, fue detenido un varón de 41 años por un delito de atentado a agentes de la autoridad, tras verse implicado en una pelea y negarse a colaborar con los policías, llegando incluso a abalanzarse contra ellos durante la intervención.
Ya en la madrugada del domingo día 14, a las 1:26 horas, en el Casco Antiguo, se detuvo a un varón de 32 años por un delito de atentado a agentes de la autoridad, después de protagonizar una pelea en la que agredió a otro hombre. Cuando los agentes acudieron para prestar ayuda, el implicado opuso resistencia y lanzó un puñetazo contra los policías intervinientes.
Minutos después, a la 1:53 horas, en la plaza de los Burgos, se procedió a la detención de dos jóvenes menores de 17 años como presuntos autores de un delito de robo con violencia e intimidación. Los hechos ocurrieron en la plaza del Castillo, donde amenazaron a una empleada de un establecimiento hostelero con un objeto punzante con la intención de sustraer un datáfono, encarándose con ella y desistiendo finalmente. También se les investiga por posible uso de tarjetas de crédito a nombre de una persona ajena.
A las 7:21 horas del domingo, en la avenida de Villava, se detuvo a un varón de 32 años por un delito de quebrantamiento de medida cautelar. La intervención se inició tras una llamada del conductor de un autobús urbano alertando de una discusión en el interior del vehículo. Una vez calmada la situación e identificadas las personas implicadas, se comprobó que el detenido incumplía una medida cautelar de alejamiento respecto a una mujer que se encontraba en el lugar.
Por la tarde, a las 18:05 horas, en Casco Antiguo, se procedió a la detención de un varón de 62 años por un delito de lesiones y amenazas graves, tras protagonizar una discusión en un domicilio que compartía con otras personas, golpeando a uno de los inquilinos con una muleta y amenazando a otro con un cuchillo de cocina. Sobre él constan varios antecedentes penales.
Finalmente, a las 20:15 horas del domingo, en la avenida Marcelo Celayeta, fue detenido un varón de 38 años por un delito de maltrato en el ámbito familiar y lesiones, tras agredir a su expareja durante una discusión, propinándole una bofetada, y golpear también al hermano de esta.