Jean Castex formalizó hoy su dimisión como primer ministro de Francia ante el presidente del país, Emmanuel Macron, anunció el Elíseo en un comunicado.

Se trato de un trámite necesario para un reemplazo que ya se esperaba y para el que la actual ministra de Trabajo, Élisabeth Borne, parte como una de las favoritas.

El conservador Castex, de 56 años, se desplazó desde el palacio de Matignon, sede de la jefatura del Gobierno, hasta el Palacio del Elíseo, donde le entregó a Macron su carta de dimisión.

Castex y los demás miembros del Ejecutivo continuarán ejerciendo sus puestos en funciones "hasta el nombramiento del nuevo Gobierno", añadió el Elíseo.

Jean Castex, antiguo alcalde de la pequeña localidad de Prades, cerca de la frontera con España, estuvo casi dos años como primer ministro francés, puesto al que llegó en julio de 2020 en sustitución de Édouard Philippe, quien ocupó la cartera tres años.

El cambio de primer ministro sucede tres semanas después de las elecciones presidenciales, que sirvieron para que Macron renovase el cargo, superando a la ultraderechista Marine Le Pen, aunque con un margen menos amplio que en 2017.

El presidente francés ya había indicado que pretendía un nuevo rumbo político para el país, con un jefe del Gobierno con un perfil más social y ecologista, e incluso que fuera mujer.

Por ello, la salida del centroderechista Castex, quien ya había adelantado su deseo de no renovar como primer ministro, era un secreto a voces.

Macron nombra a la nueva inquilina de Matignon -muy posiblemente Borne- confiando en un triunfo electoral de su nueva coalición "Ensemble" ("Juntos") en las legislativas de mediados de junio.

No obstante, el primer ministro depende de la confianza del Parlamento, por lo que, en el caso improbable de que "Ensemble" no gane en junio, su puesto estaría en riesgo.