Más de una generación de jóvenes (y no tan jóvenes) llevaban expectantes desde que el domingo Dani Martín subiera un vídeo a sus redes en el que parecía insinuar que preparaba la vuelta de El Canto del Loco, ese grupo que se convirtió en un fenómeno de fans en la primera década de los años 2000 y a los que catalogaron como sucesores de Hombres G. En ese vídeo, al cantante madrileño le preguntaban si El Canto del Loco volvía y él no respondía nada, se limitaba a señalar la fecha del 6 de octubre a las 21.00 horas. Y la historia se repitió al día siguiente. Los fans se agarraron a aquello de "quien calla otorga" y las redes se revolucionaron con un retorno que muchos llevan esperando desde que la banda se disolviera en el año 2010.

Y llegó el 6 de octubre a las 21.00 horas y lo que Dani Martín comunicó fue que va a publicar un disco homenaje a su banda inicial regrabando diez temas históricos de El Canto del Loco (algo similar a lo que hizo el año pasado su primo y también exmiembro del grupo David Otero) y añadiendo un tema inédito cuyo título es No, no vuelve, un título que muchos de sus fans se tomaron como un troleo, un vacile en toda regla, y la expectación e ilusión que llevaba tres días inundando las redes se tornó en decepción... y en memes, por supuesto. "Así es como se llama el homenaje que he hecho a la banda de mi vida", señaló Martín que, por tanto, seguirá por tanto con su carrera en solitario, también exitosa.

Una carrera que Dani Martín, de 44 años, retoma después de haberse sincerado en los últimos meses en las redes sociales admitiendo sin tapujos que iba al psiquiatra, "un paraíso, el lugar donde en estos momentos de mi vida me siento mejor, más yo, más tranquilo, más feliz" y realizando un alegato sobre la importancia de cuidar la salud mental, hecho que fue muy aplaudido por la necesidad de desestigmatizar el hecho de recurrir a profesionales de esta materia.