Sabrosas, perfectas, en su punto de sal, buenísimas e incluso cojonudas han sido algunas de las palabras que han elegido los comensales de Sesma para dar su veredicto y valorar las pochas que, con mimo y esmero, se han encargado de hacer Javier Lorente y Ángel Morrás para esta tradicional comida popular que ya va por su 37ª edición. Más de 1.000 personas han dado buena cuenta de este manjar que ha cocinado durante parte de la mañana (e incluso alguna hora del lunes por la tarde) esta pareja por segundo año consecutivo.

Una de las novedades, ha explicado Lorente, se ha sentido a las 10.00 horas y es que en ese momento ha sonado un cohete que ha alertado a los vecinos de que se empezaban a cocinar entonces las pochas. A este le ha seguido otro a las 12.00 horas, que es cuando han comenzado a hervir, otro a las 13.30 horas, cuando han acabado de cocinar, y el último, a las 15.00 horas, para avisar de que comenzaba el reparto. “Es algo que oí en la radio que hacían en Ezcaray y me pareció una muy buena idea. De esta forma la gente se hace un poco cargo de los plazos y de lo que cuesta hacer las pochas”.

Más relajados después de la experiencia adquirida el año pasado, han apuntado los cocineros que “innovaciones en cuanto a los ingredientes, las justas, porque así funciona, y bien. Hay que tener en cuenta que es una comida para muchas personas y entonces hay que tener cuidado y no experimentar demasiado”. Hoy han cocinado 350 kilos de pochas en 10 perolas a las que han añadido un caldo y un sofrito con cebolla, pimiento, zanahoria, puerro y ajo así como panceta, chorizo y jamón. 

Además, y otra de las incorporaciones de este año es que han hecho un sopero sin carne para gente o bien vegana o vegetariana o para personas a las que no le gusta la carne así como para la comunidad islámica de la localidad. 

Haciendo pueblo

Tras catarlas y darles el visto bueno, han asegurado estos cocineros que “este año no están tan sosas; el año pasado, el primero, es verdad que nos quedamos escasos. Creo que le hemos cogido el punto”.

“Es cierto que a mí me gusta cocinar pero yo no he manejado una cocina grande y Ángel sí, así que controla más de tiempos y de trucos y voy aprendiendo”, ha comentado Lorente. Además, han afirmado que no les importa invertir la mañana entre fogones porque “es algo que merece la pena; es bueno que las pochas de Sesma se sigan haciendo de esta manera, es decir, aquí, haciendo pueblo, que no haya que recurrir a un catering, y que sea un trabajo conjunto; sería una pena que se perdiese esto. Eso sí, para eso hace falta algo más de implicación; con más gente saldría todo mejor porque hay momentos de mucha actividad en los que hace falta ayuda. Por ejemplo, este año en vez de bolsas de 5 kilos eran paquetes de 500 gramos y ha habido que echarlas todas más o menos a la vez y hemos tenido que pedir ayuda a la brigada porque si no, no nos daba”.

Numerosas autoridades

En una abarrotada calle, entre decenas de mesas de cuadrillas locales, ha estado también la zona de las autoridades políticas que se han acercado hasta la localidad ribera. Allí han estado, entre otras, la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite; el vicepresidente segundo y consejero de Ordenación del Territorio, Vivienda, Paisaje y Proyectos Estratégicos, José María Aierdi; el presidente de la Mancomunidad de Montejurra, Emilio Cigudosa; así como ex consejeros, alcaldes y ediles de municipios como Arróniz, Lazagurría, Lodosa y Viana, entre muchos otros. 

La sobremesa, que se ha alargado hasta cerca de las 18.00 horas, que es cuando todos han tenido que despejar la calle para el encierro, ha estado amenizada por la charanga. 

Algunas novedades

Las fiestas, que afrontan ya la recta final, apuntaba la edil de Festejos, Nieves Martínez, “contarán con la novedad de la exhibición de trial (que será este miércoles) y, además, hemos acortado el encierro para que sea más seguro y para que las vacas no se queden paradas en la parte de arriba”.