Osasuna inicia el curso con más asignaturas de su historia visitando el campo del Celta. El primer partido de la temporada suele tener un alto grado de incógnita porque mide intensidad, concentración, predisposición, interés inicial, habilidades del grupo y todo lo que se quiera en los 90 minutos de estreno. Todos los equipos quieren llegar en el mejor estado de forma posible y suele estar en los matices y detalles el desenlace, y por supuesto en el acierto.

La sexta temporada de Jagoba Arrasate y de su cuerpo técnico al frente del conjunto navarro se debe notar en días como el de hoy, cuando se debe poner sobre el tapete los mecanismos y maneras de sacar un buen marcador cuando todo está casi por empezar y los automatismos valen más que el entusiasmo. La plantilla no ha sufrido grandes variaciones salvo por la marcha de Abde, el gran desquiciador, pero mantiene el bloque, con nuevas incrustaciones más que interesantes y competitivas, como Alejandro Catena y Johan Mojica –también está por ver en Primera el prometedor Raúl García de Haro–, y con la indudable progresión de los futbolistas importantes del pasado curso, caso de David García, Aimar Oroz, Lucas Torró, Jon Moncayola, Moi Gómez y compañía de los que se puede esperar más.

Hoy toca Liga y el objetivo no es otro que comenzar sumando, iniciar la cuenta que aporta tranquilidad, confianza y que se presenta como el reto básico del curso. Se debe confiar en la madurez del grupo y conceder que Osasuna no se va a despistar ante el paisaje espectacular que se le presenta en el curso, pero ayer Arrasate ya anunció la importancia de empezar con puntos en el zurrón para que la confianza comience a regar el cuerpo del equipo y todo vaya mejor.

Al técnico rojillo le ha echado una mano a la hora de hacer la convocatoria circunstancias de varios jugadores que les han hecho caerse de sus planes. Los últimos problemas físicos de Kike Barja, la negociación de Kike García con el Alavés, la llegada a última hora de Raúl García de Haro le han aligerado la toma de decisiones al entrenador. Parece segura la inclusión en el once de dos de los fichajes Catena y Mojica, y el resto de la alineación dependerá del perfil que le quiere dar Arrasate al Osasuna de las cuatro competiciones.

El Celta va a tener nuevo cuño con la llegada de Rafa Benítez al banquillo. El entrenador madrileño siempre ha sido un tipo ordenado en sus propuestas y, a partir de la solidez, ha cimentado grandísimas temporadas en clubes enormes, como el Liverpool –ganó la Champions 2005–. Técnico muy metódico, Osasuna ya sabe que solo va a encontrar en el Celta las grietas que hay al inicio de la preparación. Con Gabri Veiga a un paso de ser traspasado al Nápoles, hay otras cosas que parecen claras. Mingueza y el exrojillo Manu Sánchez parecen fijos en los laterales, al igual que Carles Pérez y Jonathan Bamba en los extremos. Aspas, al que Benítez piensa dosificar, sigue siendo indiscutible, y Larsen tendrá de inicio una nueva oportunidad mientras no llega otro nueve. Hay faena.

Los datos

Cuatro descartes. El lesionado Darko Brasanac; el recién llegado Raúl García de Haro; Kike Barja, con problemas físicos; y Kike García, que negocia su fichaje por el Deportivo Alavés han sido los hombres descartados por Arrasate.

Debuts. Catena y Mojica tienen muchas posibilidades de debutar como jugadores de Osasuna en encuentro oficial. Arnaiz también ha sido citado en esta segunda etapa como rojillo.

El Celta no gana desde 2014. El Celta lleva sin comenzar la Liga ganando en Balaídos desde la temporada 2014.

Manu Sánchez, citado. El exlateral izquierdo de Osasuna ha sido convocado con el Celta para este encuentro. Rafa Benítez, el técnico, debuta en el banquillo del equipo gallego.