PAMPLONA. Movimiento Pro Amnistia ha criticado el "uso abusivo que realiza el Estado" de la prisión preventiva, algo "sumamente grave" que achaca a "esos espacios de opacidad que se dan durante el periodo de incomunicación" de las personas detenidas y que afecta a "decenas y decenas de personas en Euskal Herria".
Así lo ha puesto de manifiesto en rueda de prensa el miembro de Movimiento Pro Amnistia Iosu Esparza, quien se ha referido a esta "utilización de la prisión preventiva" en los casos de Araitz Amatria y Sergio Boada, que han permanecido dos años en la cárcel tras ser detenidos en 2008 por un presunto delito de colaboración con ETA y que están a la espera de conocer la sentencia por este caso.
Junto a Esparza, han comparecido Amatria, Boada, y varios vecinos del barrio de San Juan de Pamplona, como la viuda de Angel Berrueta, María del Carmen Mañas. Esparza, quien ha señalado que Amatria y Boada salieron en libertad el pasado viernes, 3 de diciembre, ha afirmado que la "utilización" que realiza el Estado de la prisión preventiva es "sumamente grave".
Además, ha defendido que "este uso abusivo de la prisión preventiva se da precisamente por esos espacios de opacidad que se dan durante el periodo de incomunicación". Esparza ha recordado que "Araitz Amatria denunció haber sufrido torturas durante su detención que le obligaron a autoinculparse en diferentes cosas". "Esto es algo que se repite con decenas y decenas de personas en Euskal Herria", ha asegurado.
Por otra parte, Esparza ha criticado la "salvaje carga policial que realizó la Policía Nacional" durante un acto de bienvenida que llevaron a cabo familiares y amigos a Araitz Amatria y Sergio Boada el pasado 3 de diciembre en el barrio de San Juan de Pamplona. Durante la rueda de prensa han mostrado un vídeo de la carga policial, en la plaza de la Asunción.
Según ha relatado Esparza, esta carga se realizó "con toda impunidad, sin aviso previo, sin justificación alguna, y con total desproporcionalidad". "Este acto era público, y en él no había nada que esconder; era un recibimento a dos vecinos del barrio que acababan de salir de la cárcel", ha defendido.