La asociación Amagintza ha reivindicado que la lactancia materna es “un derecho humano” y un “factor de igualdad”, y ha reivindicado, entre otras medidas, ampliar el permiso por cuidado infantil al menos hasta el primer año de vida del bebé para que “ninguna mujer pierda su integración laboral y no se obligue a las mujeres a tener que separarse tempranamente de sus criaturas sino es lo que quieren.
Pide, además, profesionales de la salud “capacitados que puedan brindar apoyo útil y respetuoso para apoyar la lactancia materna”, un banco de leche “cercano que garantice y favorezca la salud de los bebés más vulnerables”; políticas sanitarias relacionadas con la maternidad, “que tengan a la madre y su criatura en el centro”; políticas de apoyo a las familias, “especialmente para aquellas más vulnerables”; y entornos laborales “amigables que apoyen la lactancia materna y a la mujer que desea compatibilizar lactancia y trabajo, sin ser discriminada o violentada”.
En un comunicado, con motivo de la celebración de la Semana Mundial de la Lactancia Materna, la asociación defiende que “las madres y familias precisan apoyo, soporte y estructuras políticas, laborales, sociales y sanitarias que les permitan, si así lo desean, amamantar a sus criaturas el tiempo y en el lugar que quieran”.
Amagintza destaca que la lactancia materna “es un derecho humano” que “debe ser protegido por los estados para que las mujeres que lo deseen puedan ejercerlo en cualquier lugar y momento”. De la misma manera, defiende que esta práctica “puede reducir las desigualdades económicas, de salud y sociales si se cuenta con el respaldo suficiente y adecuado para ello, por lo que se precisa garantizar que todas las madres y sus familias tengan a su disposición recursos de información y apoyo para amamantar con éxito”.