La ola de calor que está sacudiendo las calles y ciudades de Navarra en estos días ha empujado a muchas personas a usar la de imaginación para sobrevivir a las altas temperaturas. Y, en relación a ello, a cómo resistir dentro del hogar, con aire fresco, optimizando el uso de electrodomésticos y sin pasar agobios.
Por esa razón, en los últimos tiempos se han puesto de moda varios métodos con los que conseguir que el bochorno no haga mella en casa. Todo ello, además, sin que el consumo de energía aumente y con recursos sencillos.
El truco de las persianas: frescor que dura todo el día
Esta estrategia, conocida como el ‘truco de la abuela’, cabe mencionar que, ante todo, es bastante sencilla, pero igual de efectiva para que el bochorno que ha llegado a muchos hogares desaparezca en cuestión de muy pocas horas, cuando no en minutos.
El método para aguantar mejor en estas fechas de verano es, nada más y nada menos, que bajar las persianas y estores de la vivienda desde primera hora de la mañana. Como los rayos de sol no penetran en el interior, se concentra menos calor durante el día.
Asimismo, cuando el termómetro baja por la noche o al amanecer, es el mejor momento para abrir las ventanas de par en par y así ventilar toda la casa. Por si fuera poco, ahorramos energía, pues no hace falta poner en marcha el aire acondicionado.
Justo en el instante en el que el sol empiece a calentar, es suficiente con cerrar las ventanas, así como bajar los estores y las persianas para que el ambiente fresco se mantenga el máximo tiempo posible en el interior del hogar.
Ventajas de este truco
Tal y como hemos mencionado antes, el ahorro energético que supone este método, junto con lo fácil que resulta de aplicar, se notará también en las facturas de final de mes, con grandes cambios.
Es más, en muchas casas, este hábito marca la diferencia entre una ola de calor y un entorno equilibrado. Aun así, hay que saber hacerlo correctamente, porque, por mucho que dejemos ventilando el hogar, poco conseguiremos si el aire que entra es muy caliente.
Apagar, cambiar y ahorrar: pequeños gestos que suman
Dejando a un lado el truco que hemos visto, hay que intentar que otras fuentes de calor de la casa queden apagadas o inutilizadas en estas jornadas. Cuanto menos de ellas estén activas en díasde temperaturas extremas, mejor.
Las bombillas, cuanto más tiempo estén apagadas a lo largo del día, mejor. Las hay que generan calor, como las pequeñas, y las que aumentan la temperatura más rápido. Por eso mismo, hay que cambiarlas por las que sean LED para extremar el ahorro.
Esto, junto con un uso moderado de los aparatos eléctricos, hará que muy pronto notemos mejoría en la comodidad de la casa. Del mismo modo, televisores, móviles, ordenadores, etc., y otros aparatos tecnológicos es mejor tenerlos apagados para que no generen calor.