Las autoridades indias han informado este miércoles del arresto de un policía que presuntamente violó a una adolescente de 13 años cuando esta acudió a la comisaría para denunciar que había sido víctima de una agresión sexual semanas antes. La presunta violación tuvo lugar la semana pasada en la ciudad nororiental de Lalitpur, después de que la menor acudiese por primera vez a la comisaría a presentar una denuncia, en la que alegaba que el 22 de abril cuatro hombres la violaron, ha afirmado este miércoles en un vídeo publicado en Twitter el superintendente de la comisaría, Nikhil Pathak.

Horas después de presentar la denuncia, la menor "regresó y el encargado de la comisaría también la violó", continuó el oficial, precisando que "el policía ha sido suspendido con efecto inmediato, está acusado, y se han formado equipos para arrestarlo". Una mujer ya había denunciado el secuestro de la menor por parte de cuatro hombres que se la llevaron a otra ciudad y abusaron sexualmente de ella durante cuatro días, según la fuente.

Sus agresores la liberaron el 26 de abril en Lalitpurl, del estado de Uttar Pradesh, donde un día después la joven denunciaría la agresión sexual y más tarde sería violada por el encargado de la comisaria, informó Pathak. Además del policía, también se encuentra arrestado uno de los cuatro hombres que secuestraron a la joven en abril, aunque el oficial comunicó que ya se está llevando a cabo una investigación en profundidad para detener al resto de agresores.

Medios locales han asegurado que el resto de efectivos policiales que se hallaban en la comisaria en el momento de la presunta violación han sido apartados de sus funciones. En 2020 se denunciaron 28.153 violaciones en el país asiático, cerca de 80 al día, según los últimos datos de la Agencia Nacional de Registro de Delitos de la India (NCRB).

La India vivió masivas protestas sin precedentes contra la violencia a las mujeres a finales de 2012, tras la violación en grupo de una joven universitaria en un autobús en Nueva Delhi y su posterior muerte por las graves heridas. Ese caso marcó un antes y un después en el país y desde entonces las leyes contra las agresiones sexuales se han ido endureciendo, acelerando también la pena capital contra algunos agresores, aunque muchos critican que las medidas no han sido suficientes.