Bruselas - Bruselas ha ordenado a Malta que refuerce la aplicación de sus leyes contra el blanqueo de dinero. La Autoridad Bancaria Europea (EBA en sus siglas en inglés) descubrió debilidades “sistemáticas” en la supervisión de flujos de dinero y podrá dar órdenes a Malta si esta no actúa. La falta de control de los bancos al blanqueo de dinero ha provocado la dimisión de varios ejecutivos en bancos europeos durante los últimos meses.

La Unión Europea quiere poner fin al blanqueo de capitales que se produce todos los días dentro de su territorio. Gran parte del dinero del narcotráfico, el terrorismo o el crimen organizado se introduce en los bancos europeos y acaba circulando en el mercado legal con una supervisión que no está dando resultados. El principal problema no es su entrada en sí, sino la falta de cooperación entre los reguladores nacionales de la banca. A la falta de cooperación e intercambio de información entre los organismos se suma la imparable digitalización de la banca, que hace cada día más complicado conseguir atrapar a los defraudadores. También contribuye la falta de control de algunos bancos, cuyos directivos no quieren parar los grandes flujos que entran en la institución.

Por eso, tras el informe sobre Malta de la EBA, la agencia independiente de la UE encargada de supervisar el sector bancario de los 28, en el que describe las debilidades sistemáticas en la supervisión de flujos de dinero, la Comisión ha decidido tomar cartas en el asunto.

El informe avisa de “deficiencias generales y sistemáticas” en el trabajo de la agencia gubernamental independiente encargada de combatir el lavado de dinero y el financiamiento del terrorismo. La Comisión hará su veredicto, será vinculante y en caso de que la autoridad no actúe, la EBA podrá dar órdenes directas a los bancos de Malta para que cumplan las normas de la UE.

El problema va mucho más allá de la isla mediterránea ya que países como Dinamarca u Holanda tienen también graves problemas para poder detener el blanqueo de capitales de sus bancos. - Borja Quintana/Aquí Europa