pamplona - El PP y el PSOE defendieron su pacto para renovar el Poder Judicial frente a las crecientes críticas por el reparto político de cargos y el perfil de los magistrados elegidos como vocales. Podemos avisó de que no da por cerrado el acuerdo sobre el CGPJ y sigue poniendo exigencias sobre la mesa. En la formación no quieren hablar todavía de nombres, pero admiten que hay problemas con el principio de acuerdo alcanzado con los socialistas. Su exdiputada Victoria Rosell, avalada por la asociación Juezas y Jueces para la Democracia, no tiene garantizada una de las 20 vocalías que deben renovarse, de hecho, la dan por perdida, aunque no es el único escollo, admitieron fuentes parlamentarias. “Hasta que no se pone el papel sobre la mesa no se puede dar ningún acuerdo por cerrado. Seguimos hablando”, manifestó su portavoz adjunta en el Congreso, Ione Belarra.

Las críticas más duras al acuerdo entre populares y socialistas procedieron, de nuevo, de Ciudadanos, cuyo líder, Albert Rivera, cargó contra Pedro Sánchez y Pablo Casado por intentar renovar el CGPJ “en un cuarto oscuro”, como si fueran cromos, y además incluir “a los populistas” en los órganos judiciales. Sin embargo, para el exministro de Justicia Rafael Catalá, negociador del pacto por el PP, son esas críticas las que se acercan a “planteamientos populistas”, ya que lo que ellos han hecho es aplicar la ley.

La portavoz parlamentaria del PSOE, Adriana Lastra, llamó al resto de fuerzas a participar en “futuros acuerdos de Estado” y se mostró convencida de que una “mayoría amplia” de la cámara puede verse representada en los nombres propuestos por los socialistas, ya que son personas “progresistas” y de “reconocido prestigio”.

Fuerzas minoritarias dejaron claro su descontento con el acuerdo, un “estercolero” y “pasteleo vergonzoso”, en opinión de ERC, o una nueva muestra del viejo bipartidismo, para Compromís. Y como ejemplo citaron el caso de Manuel Altava, senador del PP que achacó a la República las muertes por bombardeos nazis en Castellón, que será vocal a instancias del PP, y el de Bernando Fernández, ex exvicepresidente del Principado de Asturias en un gobierno socialista y que ha sido propuesto por el PSOE.

Tras hacerse público que se ha pactado ya que el presidente será Manuel Marchena, la Asociación Judicial Francisco de Vitoria (AJFV) anunció que estudiará hoy recurrir el nombramiento. Ya recurrió hace cinco años el de Carlos Lesmes, pero el Tribunal Supremo determinó entonces que, aunque era vox populi que iba a presidir el CGPJ antes de que los vocales fueran elegidos, había sido votado por “voluntad libre” de los vocales y no podía hablarse de “regateos o convenios políticos previos”. - D.N.