MADRID. El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunciará la semana que viene la composición del nuevo Ejecutivo, el primero de coalición de la democracia, porque según admiten fuentes gubernamentales aún quedan cosas por cerrar.

Fuentes socialistas han informado esta tarde, poco después de la investidura de Sánchez, de que será la semana que viene cuando el presidente anuncie a los miembros de su Ejecutivo.

La decisión de Sánchez, adelantada por fuentes del PSOE, contradice los planes iniciales que otras fuentes del actual Ejecutivo habían apuntado durante los últimos días.

Sin embargo, fuentes consultadas por EFE han explicado esta noche que Sánchez no tiene aún todo cerrado y aunque "pronto lo estará" no puede anunciar todavía la composición del Ejecutivo y por eso habrá que esperar unos días más.

La estimación que trascendió en principio era que Sánchez anunciaría la composición de su Gobierno después de prometer su cargo ante el Rey. Dicha toma de posesión está prevista para mañana a las once.

Si bien es cierto que los plazos dependen de quien ya ha recibido la confianza del Congreso para ser presidente, las fuentes consultadas coincidían en la premura por cerrar la composición del futuro nuevo Gabinete.

Finalmente será más tarde de lo previsto porque como han insistido fuentes del Gobierno a Efe, hay todavía "cosas por cerrar".

Restan importancia, además, al hecho de que Podemos ya haya filtrado los nombres de los dirigentes de ese partido que estarán en el Consejo de Ministros y explican que la razón no es otra más que en la formación morada comunican de una forma y en el Ejecutivo y en el PSOE de otra.

El próximo Gobierno será el primero de coalición de la democracia.

El líder de Podemos, Pablo Iglesias, será vicepresidente del área social, y otros cargos significativos de la organización, como la aún portavoz parlamentaria, Irene Montero; el portavoz adjunto y coordinador de IU, Alberto Garzón; o la diputada gallega de Galicia En Común, Yolanda Díaz, ocuparán las carteras de Igualdad, Consumo y Trabajo, respectivamente.

Así lo han avanzado fuentes de Unidas Podemos, que también han situado al sociólogo Manuel Castells como ministro de Universidades.

Dicho organigrama, en lo que atañe a Podemos y a sus confluencias parlamentarias, tiene que ratificarse, y es Sánchez el que ejerce la potestad para ello: es él, como presidente, el que nombra y destituye a los ministros.

Sin embargo, qué dirigentes o representantes del PSOE formarán parte del nuevo Gobierno o qué personas ajenas al partido lo harán a propuesta del líder socialista es algo que no se sabe aún.

Durante estos días, varios ministros en funciones han eludido pronunciarse sobre si continuarán en sus cargos.

Diversas fuentes socialistas han citado a Carmen Calvo, a Nadia Calviño (el propio Sánchez se comprometió a ello en plena campaña electoral) y a María Jesús Montero, quien a la gestión al frente de Hacienda añadiría la portavocía del Ejecutivo, como cargos que seguirán.

Otro anuncio que Sánchez lanzó en la anterior campaña electoral fue la creación de un ministerio que coordinara las políticas destinadas a hacer frente al reto demográfico y a contrarrestar la despoblación de la España interior.

Cuestiones por resolver, si se confirman las atribuciones de los futuros ministros de Unidas Podemos, serán la estructura de los departamentos y cómo se repartirán las competencias, por ejemplo si Ciencia abarcará un departamento propio o se integrará en otro.