pamplona - El PP ha negado que existan “fisuras” en el partido por la estrategia a adoptar frente a Vox, pese a las discrepancias mostradas por los barones regionales sobre el pin parental, una de las exigencias de la formación que preside Santiago Abascal para pactar los presupuestos de la Región de Murcia. El portavoz del PP en el Senado, Javier Maroto, sostuvo ayer que está muy clara la línea del partido como líder de la oposición, basada en la “moderación” y en la ideología de “centro derecha”, y atribuyó el tono más duro del discurso de los populares a que en ciertas cuestiones hay que ser “vehementes”.

Una vehemencia con la que no están de acuerdo varios de los dirigentes del partido cuando se trata de defender el pin parental, la medida que lleva el sello de Vox y que el PP ha querido hacer suya enmarcándola en la “libertad de los padres para elegir la educación de sus hijos” que propugnan.

El líder del partido, Pablo Casado, ha llegado a decir que este veto parental “no es nada de Vox”, sino una medida que el PP ya implantó en la Comunidad de Madrid hace 15 años, ya que la equipara con la autorización de los padres al inicio del curso sobre las actividades extraescolares de sus hijos. Sin embargo, la propia presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, ha considerado “un error” el pin parental y ha rechazado ponerlo en marcha como propone Vox para apoyar la aprobación de los presupuestos regionales, además de que no ve “lógico” que se pueda retrasar su aprobación por esta cuestión.

Díaz Ayuso atribuye al Gobierno la polémica surgida sobre este veto parental para “buscar enfrentamientos entre los socios” del acuerdo de investidura entre el PP, Ciudadanos y Vox, además de “emponzoñar” la convivencia en el ámbito educativo.

Ciudadanos se ha sumado al rechazo al pin parental y se ha mostrado crítico con esta medida en todas las comunidades en las que gobierna con el PP, al tiempo que considera que es una “polémica ficticia”, según el vicepresidente madrileño, Ignacio Aguado, aunque no la atribuye solo al PSOE sino también a Vox.

Y es que, aparte de lo que cada cual califica como pin parental, Vox ha conseguido que se incluya esta autorización de los padres, más o menos explícita, en sus acuerdos para apoyar los presupuestos de los Gobiernos de PP y Cs no solo en Murcia, sino también en Andalucía. Esto es lo que no gusta a varios dirigentes del partido que abogan por una reflexión más amplia y, sobre todo, por marcar diferencias con Vox para evitar que ambas formaciones, que tienen escaños contiguos en el Congreso, puedan confundirse de cara a los posibles votantes. El presidente de la Xunta y líder del PP gallego, Alberto Núñez Feijóo, ha hecho una llamada al “sosiego” y a no “politizar la educación”, al ser preguntado sobre el pin parental, mientras el presidente de Castilla y León, Alfonso Martínez Mañueco, considera que no hay que “entrar en la libertad de cátedra de los profesores”.

De hecho, los barones regionales del partido, entre ellos Alfonso Alonso, abogaron, en la última reunión con Casado con motivo de la Junta Directiva Nacional de la semana pasada, por mantener la mano tendida al Gobierno para asuntos de Estado, entre los que se citaron la educación. Casado ha asegurado que esta disposición está siempre encima de la mesa, pero el enfrentamiento de los últimos días con el Gobierno por el pin parental no augura una posibilidad de acuerdo en esta materia, ni siquiera a nivel interno en el partido, mientras cada uno de los dirigentes territoriales marca la línea roja a Vox a su manera. - Diario de Noticias

Asuntos de Estado. Los barones regionales del PP abogaron, en la última reunión con Pablo Casado con motivo de la Junta Directiva Nacional de la semana pasada, por mantener la mano tendida al Gobierno para asuntos de Estado, entre los que se citaron la educación.