pamplona - El Consejo de Ministros aprobó ayer el nombramiento de la exministra de Justicia Dolores Delgado como fiscal general del Estado tras recibir el aval del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y tras su comparecencia en la Comisión de Justicia del Congreso. La portavoz del Ejecutivo, María Jesús Montero, anunció en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros el nombramiento de Delgado, de quien destacó su amplia carrera profesional “colmada de méritos”.

Delgado asume la dirección de la Fiscalía tras un proceso de designación en el que su elección ha sido cuestionada y criticada por buena parte de los jueces y fiscales y por partidos políticos de la oposición como el PP, Vox o Ciudadanos. De hecho, la portavoz del grupo parlamentario popular, Cayetana Álvarez de Toledo, adelantó ayer que el PP recurrirá ente el Tribunal Supremo el nombramiento de Delgado por “no cumplir los criterios de idoneidad, neutralidad e imparcialidad requeridos para el cargo”. “El grado de odio, animadversión y hostilidad de cada una de sus palabras a lo que no es de su cuerda es inhabilitante para su puesto”, argumentó Álvarez de Toledo.

Entre las tareas que encontrará sobre la mesa la nueva Fiscal General estará el nombramiento de medio centenar de cargos en la cúpula fiscal, entre ellos el del teniente fiscal del Supremo, Luis Navajas, cuyo cargo venció el pasado mes de diciembre; además de puestos en Anticorrupción y el Tribunal de Cuentas. Navajas ha estado ejerciendo en funciones tras el cese de la última fiscal general, María José Segarra, que coincidió en el cese del primer Gobierno de Sánchez tal y como dicta el Estatuto Fiscal.

Durante su comparecencia en el Congreso la exministra de Justicia contestó a los grupo parlamentarios que cuestionaron su imparcialidad que valorará “caso a caso” si se abstiene en las causas de las que pudo tener anteriormente conocimientos. Para portavoces del PP, Vox, Delgado no debería tomar ningún tipo de decisión en causas como la del procés, con la que estuvo contacto debido a su anterior responsabilidad política.

Como prioridades para su mandato, Delgado anunció en sede parlamentaria que apuesta por promover la motivación de los fiscales; romper el “desequilibrio” en el acceso de mujeres a puestos de la carrera fiscal; dotar de “instrumentos adecuados” los puestos de trabajo; así como dar una proyección internacional, interesando la participación de la Fiscalía en instituciones internacionales, con interés especial en el Consejo Europeo; la digitalización del Ministerio Público.

Habló igualmente de introducir variaciones en el sistema de acceso a la carrera fiscal. Sobre este punto abogó por implantar un sistema “menos memorísticos” y una bolsa pública de becas y preparadores para que todo el mundo, independientemente del nivel socioeconómico y de donde residan puedan prepararse las oposiciones. Delgado defiende el proyecto anunciado por el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, de reformar la Ley de Enjuiciamiento Criminal de modo que la instrucción pase a manos de los fiscales, así como la derogación de su artículo 324, que pone fecha tope a estas investigaciones. - M.G.